DIALECTICOS
Como siempre, la ultrazurda ha copado el escenario. La mujer fue devaluada, casi dejada a un costado por una izquierda que hace suya cualquier causa que le resulte proteica y alimente la utopía que la ha fanatizado. Cuando miles de mujeres, reclamando sus derechos en el lugar, se agolparon, consignas tergiversadas, conceptos entremezclados y argumentos rebuscados, el verdadero objetivo fue desnaturalizado. A mujeres tripulantes del submarino San Juan no se las ha mencionado, pero ilustre feminista citó a Nahuel y a Santiago. Algunos hasta creyeron que era lógico mezclar el derecho a abortar y al mismo tiempo exigir y obligar a este gobierno a resucitar a un ahogado. Extraviada