Hawking, el científico ateo que fue recibido por cuatro Papas
Fue miembro de la Academia Pontificia de las Ciencias. Afirmaba que no hace falta Dios para crear el Universo.
Stephen Hawking quizás no fue el científico más brillante o el más premiado, pero sin duda era el más famoso. Su popularidad se debió a sus aportes en el campo de la cosmología, a su impresionante tenacidad para sobreponerse a una enfermedad incapacitante como la esclerosis lateral amiotrófica y a su talento como divulgador científico. Sus libros Breve Historia del Tiempo (1988) y El Universo en una cáscara de nuez (2001), un intento por difundir en un lenguaje comprensible los enigmas del Universo, fueron leídos por millones de personas alrededor del mundo. Gracias a estas obras, cientos de conferencias y apariciones en series de televisión como Los Simpsons y The Big-Bang Theory, Hawking se convirtió en una auténtico rockstar de la ciencia. Sus opiniones, ya sean sobre el futuro del planeta, la inteligencia artificial, la eutanasia o la vida extraterrestre, tuvieron siempre una gran repercusión mediática. Es que, ante todo, con sus ideas Hawking fue un gran provocador.
Basta recordar su libro El gran diseño (2010) con el que despertó una fuerte polémica al afirmar que Dios “no era necesario” para explicar el origen del Universo. “Puesto que hay una ley como la de la gravedad, el Universo puede crearse a sí mismo de la nada, y lo hace. La creación espontánea es la razón por la que existe algo, en vez de nada, por la que existe el Universo, por la que existimos nosotros”, escribió el astrofísico británico. El arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, y otros líderes religiosos británicos salieron rápidamente a cuestionarlo. “La física por sí sola no resolverá la cuestión de por qué existe algo en lugar de nada”, sostuvo Williams.
A pesar de ser ateo, Hawking fue el miembro más prestigioso de la Academia Pontificia de las Ciencias, participó de varios eventos científicos y fue recibido por los últimos cuatro Pontífices. En noviembre de 2016 estuvo en El Vaticano para participar del encuentro “Ciencia y sostenibi-