Recuerdos de landrú
La Biblioteca Nacional inauguró el martes 13 de marzo la exposición titulada Breve historia universal de Landrú que repasa la obra del humorista Juan Carlos Colombres quien adoptó ese seudónimo par firmar sus dibujos a partir de 1947. La muestra aunque ocupa solo dos pequeñas salas es muy representativa de sus creaciones a lo largo de 63 años porque abarca sus primeros dibujos y sus colaboraciones para revistas como Cascabel, Vea y Lea, Rico Tipo y El Hogar que le permitieron en 1952 dejar su empleo en Tribunales y vivir de su talento para el humor. Su consagración y su popularidad surgió en 1957 cuando fundó la revista Tía Vicenta que semanalmente vendía 100 mil ejemplares. El personaje así llamado estaba inspirado en una tía de Colombres que solía hacer comentarios de política desde una visión ingenua y algo disparatada. Parte del contenido de la revista era la caricatura y la sátira política basada en una profunda información, pero también incluía humor basado en personajes como Jacinto W, el reblán, La familia Cateura, El señor Porcel y Rogelio el razonador. Los diálogos de Jacinto W con su hermana se basaban en recuerdos de cosas pasadas de moda contrastadas con las novedades del momento. La familia Cateura se inspiraba en un padre autoritario y maltratador, y los personajes de Porcel y Rogelio elaboraban razonamientos que llevaban a conclusiones absurdas. Una sección llamada Lo que canta Tía Vicen- ta era una fotonovela con fotos antiguas que ilustraban la letra de una canción. En los 60 creó los personajes de María Belén y Alejandra, dos jóvenes que pretendían ser refinadas y seguir la última moda y caían en el ridículo. Norma Aleandro y Adriana Aizenberg las recrearon en la televisión. Cuando en 1966 Tía Vicenta fue clausurada por Juan Carlos Onganía, disgustado por ser caricaturizado como una morsa, Landrú crea las revistas María Belén, y luego Tío Landrú.
Sus dibujos y sus personajes fueron usados además en la publicidad de diversos productos como la yerba Aguila, la gaseosa Bidú y los calefones Longvie, y en el lanzamiento de la película Il Sorpasso. El humorista también ilustró algunas tapas de discos (que yo ya había exhibido en la Biblioteca Nacional en 2000 y 2002 en la muestra Taparte con mi colección de tapas de discos ilustradas por famosos artistas). Asimismo, Landrú fue coautor del guión de los primeros programas de Tato Bores, de la película La chacota, con Luis Aguilé y compuso algunas canciones humorísticas. Su trayectoria en diarios abarca su paso por El Mundo y por Clarín, donde culminó su carrera en 2008, nueve años antes de morir.