Venden en el exterior edificios históricos de Buenos aires
en el brochure al que accedió PeRFil el gobierno también da la opción de concesión de estos edificios. Podrían convertirse en hoteles.
Durante la última edición de la feria más importante del sector inmobiliario internacional, que se hizo en Cannes del 13 al 16 de este mes, una particular oferta llamó la atención de los visitantes: en su stand del Mipim2018, el gobierno porteño puso sobre la mesa, entre otros, dos de los edificios más emblemáticos de la Ciudad: Bolívar 1 –donde funcionó históricamente la sede comunal, hoy ocupada por el Ministerio de Hacienda, y que, según decían hasta ahora, iba a convertirse en museo–, y el ex edificio de La Prensa, en Av. de Mayo al 500, donde funciona el Ministerio de Cultura porteño y que es monumento histórico nacional.
De acuerdo con el brochure que se entregaba a los interesados, y al que tuvo acceso PERFIL, Bolívar 1 fue tasado en US$ 30,7 millones, mientras que el edificio La Prensa, en US$ 20 millones.
La intención del Ejecutivo porteño sería cederlos en concesión o venderlos, a pesar de que ambos cuentan con protección APH 1 (Area de Protección Histórica), ya que De las propuestas (der.). El stand en Mipim (arr.). forman parte del entorno de la Plaza de Mayo. El hecho de que sean protegidos inhabilita cualquier modificación a su estructura original, la fachada o en su interior.
Sin embargo, la Ciudad ve con buenos ojos que sean concesionados o adquiridos por alguna cadena hotelera internacional de primer nivel. Para ello, desde la Dirección General de Proyectos de Participación Público-Privada (PPP), que dirige Ezequiel Rebruj, se invitó a los responsables de negocios de diferentes cadenas premium a conocer los detalles y las posibilidades que ofrecen ambos edificios. La idea apuntaría a replicar el modelo de gestión que se aplicó en la reconversión del Gran Hotel Royal de Budapest, que pasó de ser un edificio de oficinas públicas a un exclusivo hotel de cinco estrellas.
Ante la consulta de este diario, Rebruj declaró vía mail que “es muy importante para Buenos Aires estar presente en una de las ferias más importantes de Real Estate del mundo, ya que para que la Ciudad crezca y sea sustentable económicamente, necesitamos trabajar con actores privados como principales aliados”.
Otro posible destino que se baraja en las entrañas del Ministerio de Modernización, cartera de la que depende Rebruj, sería darlos en concesión y reconvertir estos inmuebles en espacios culturales de gestión público-privada.
De todas maneras, cualquiera sea la modalidad que se aplique a estos edificios, tanto la venta como la concesión deberán pasar por la Legislatura. Para ello, deberá sancionarse una ley que sea aprobada por 40 votos, de do-
ble lectura con audiencia pública.
Además de estos inmuebles, la Ciudad también puso sobre la mesa de negocios el futuro Parque de la Innovación, que se erigirá donde antes funcionaba el Tiro Federal, y el Buenos Aires Design (ver aparte). En alerta. Para María del Carmen Arias, de la ONG Basta de Demoler, la acción que pretende llevar adelante la Ciudad es “inconcebible. Estos edificios son de la Ciudad, no para que el gobierno de turno haga un negocio inmobiliario. Es una barbaridad que no podemos permitir. ¿Qué viene después, el Cabildo?”, declaró.
Por su parte, la patrimonialista Mónica Capano también dejó en claro su posición. “Es una locura que la Ciudad se desprenda de estos edificios. Con este tipo de acciones se pierden referencias patrimoniales simbólicas de Buenos Aires. El uso que se les podría dar a estos predios debe ser compatible con lo patrimonial”, aseguró la ex titular de la Comisión Nacional de Monumentos.