La relación con las multis
Para insuflar competencia a los mercados locales, el Gobierno se recuesta en “la amenaza externa”. En los casos de la industria manufacturera, la apertura de importaciones es la vía para forzar a las marcas locales a bajar costos y precios al consumidor. Se vio como caso testigo en 2016 la baja de aranceles a computadoras y el cese de la producción en Tierra del Fuego. Con los laboratorios, se les da participación a los extranjeros en las licitaciones para obligar a bajar costos a un mercado hasta ahora cartelizado y manejado, aunque lo desmienten, por pocas compañías. La megacompra de factor 8 para hemofílicos la ganaron Pfizer, que tenía 70 millones de dosis ociosas por un contrat caído de Brasil y CSL Behring. Ahora, para negociar con el PAMI, el Gobierno primero acordó con los laboratorios extranjeros, y dejó aislados a los nacionales, que amenazaron con desabastecer pero ante la presión oficial terminaron acordando. Puede haber, dicen en CILFA, alguna retribución en cambios en patentes.