APRIETE INOPORTUNO
La derrota ante River por la Supercopa Argentina dejó heridos. La barra de Boca, por ejemplo. Ayer llegaron tres autos con vidrios polarizados al predio de Casa Amarilla, bajó Rafael Di Zeo junto con sus secuaces y enfilaron al comedor, donde el plantel del Xeneize descansaba después del entrenamiento previo al encuentro de hoy. El plan era recordarles a los jugadores los objetivos para lo que resta del año. A saber: ganar el torneo local y la Copa Libertadores.
Si bien la charla no tuvo un tono amenazante, la sola presencia de los barras intimida. El partido. Para esta tarde, Emmanuel Reynoso será el reemplazante de Tevez, mientras que el Mellizo mantiene dos dudas: Frank Fabra o Emanuel Mas en el lateral izquierdo, y Walter Bou o Ramón Abila como centrodelantero.