Giro en el crimen de la estudiante
Entre cuatro paredes. En las cárceles los días y las noches parecen más largos. Gutiérrez sabe que para sobrevivir tiene que estar muy activo. “Me anoté en los talleres y estoy estudiando como para hacer algo. Bajo a las 9 de la mañana y hasta las 12 o 13 estoy en el taller de pintura. Después, una vez por mes, voy una semana al colegio de 3 a 5 de la tarde”, cuenta desde el pabellón 8, donde convive junto a condenados y procesados por narcotráfico.
En la Unidad N° 6 de Rawson la muerte vuela bajito. Desde que ingresó, hubo tres fallecimientos violentos. “Esto es una jungla”, resume. “Tengo miedo, no te voy a mentir. En poco tiempo hubo tres muertos: uno se prendió fuego, a otro lo apuñalaron y a otro lo dejaron morir. Todos los días hay episodios de violencia. Siempre pasa algo”, revela a PERFIL.
Gutiérrez reconoce que llora “todas las noches”. “A veces no puedo dormir pensando en si me van a matar. Yo salgo a trabajar pero no sé qué me puede pasar. Acá está tranquilo pero en dos minutos todo puede cambiar. Uno no está seguro”, confiesa.
Los guardias que trabajan en el pabellón de los narcos también están sorprendidos por su detención. No pueden entender que esté alojado en un pabellón común de una cárcel de máxima seguridad. “Me preguntan: ‘¿Vos sos el cartero? ¿Cómo te mandaron acá? ¿Están locos?’. No lo pueden creer”. La declaración de un nuevo testigo en la causa que investiga el crimen de una joven de 19 años en Bahía Blanca, asesinada el martes pasado, generó un giro inesperado en la investigación. Según su relato, los tres menores que estaban acusados de acuchillar a la chica para robarle una mochila “no tienen nada que ver con el hecho” y apuntó a un joven de 18. El nuevo acusado ya fue detenido por la Policía.
Agustina Bustos fue encontrada apuñalada en las escalinatas de un monoblock del barrio Rucci de Bahía Blanca. Por el hecho, fueron detenidos tres menores de 14, 15 y 17 años. Pero ayer se acercó a la fiscalía un testigo para aportar información y desvinculó a los hasta ahora apuntados del caso.
“Le están errando, estos pibes no fueron”, dijo el testigo, según publica el sitio bahiense La Brújula 24. Y acusó a un joven de 18 años, que ya fue detenido y será indagado por la Justicia. Por su parte, la fiscal de Menores, Betina Ungaro, confirmó que, tras la declaración de dos testigos (uno presencial) del hecho, se hicieron dos allanamientos y se detuvo a Matías Moreno, de 19 años.
“No teníamos pruebas directas sino indicios sobre la participación de los menores. El viernes, en forma reservada, se presentaron dos personas que fueron muy esclarecedoras sobre cómo fue la mecánica del hecho y el lugar”, explicó la fiscal en diálogo con LU2, radio Bahía Blanca.
Ungaro sostuvo que, una vez que se resuelva la participación o no de los menores en el crimen, la causa pasará al fiscal de Homicidios.