Cuando son mayoría, tampoco llegan a jefas
Uno de los sectores donde hay mayor presencia femenina es el de la salud. Está detrás del de trabajadoras de casas particulares y educación. Sin embargo, pese a que la presencia de mujeres fue creciendo en los últimos años, se mantienen sin poder acceder a los principales cargos: solo el 25% llega a puestos directivos, ya sea en hospitales, ministerios, asociaciones profesionales o el ámbito académico.
Además de la par- ticipación en puestos técnicos y operativos, también lograron una mayor presencia entre profesionales. Eran el 20,1% de los médicos en 1980 y subieron al 46,3% en 2016.
Incluso “son mayoría en el total de estudiantes de las carreras de medicina en el país”, señala un informe del PNUD, el Programa para el Desarrollo de Naciones Unidas.
También la brecha de ingresos se replica entre las profesionales de salud y sus pares hombres, aunque está un poco por debajo del general de la economía (del 27%): las mujeres ganan un 19,6% menos a 2016.
Para solucionar el cuadro, el PNUD propone una perspectiva de género en las negociaciones salariales y también la posibilidad de extender las resi- dencias para contemplar la maternidad y las licencias.
“Cuando estás con un embarazo avanzado, te pesa un montón y hacer una guardia de 24 horas es mortal, te cansás el triple. Yo estaba empeñada en demostrar que podía trabajar igual que otro”, aseguró una jefa de servicio de terapia intensiva infantil.
“Todas lo viven con tensión al embarazo. Hay una sensación de que estar embarazada es un problema”, reconoció un cirujano cardiovascular.