La nueva conducción de la cGt recién se definiría en agosto
La CGT posterga las definiciones sobre su conducción hasta agosto y todos coinciden hoy en que la película tiene aún un final abierto. La principal novedad de la semana fue la vuelta al ruedo sindical de Hugo Moyano y el poderoso gremio de Camioneros, confirmado ante sus más leales el lunes pasado, durante un encuentro en el gremio cervecero. Hace poco más de un mes, su hijo Pablo había renunciado a la conducción. Parecía abrir el camino para una central hegemonizada por los denominados “gordos” e “independientes”, quienes defienden una estrategia de negociación con el Gobierno.
El próximo 3 de mayo se volverá a reunir el consejo directivo y cinco referentes representativos de cada uno de los sectores en pugna coincidieron, en diálogo con PERFIL, sobre dos puntos: no hay aún un consenso mayoritario para asegurar la elección de una u otra figura y el mes de agos- to aparece como la fecha más probable para la convocatoria a un congreso, facultado para elegir una nueva conducción. Algunas voces, incluso, indicaron que no se puede excluir la continuidad del triunvirato –en tal caso, sin convocatoria a un congreso– o la elección de una nueva conducción colegiada.
Durante esa reunión no podría llamarse al congreso por los plazos estatutarios que definen que la convocatoria establece un mínimo de treinta días y un máximo de sesenta días. Otro escollo es que sobre el final de mayo muchos de los dirigentes asistirán a la cumbre de la Organización Mundial del Trabajo (OIT). En este contexto, gana fuerza la sugerencia hecha por Omar Maturano (Fraternidad): realizar el congreso el 22 de agosto, cuando se cumplan dos años de la reunificación de la central. Es una fecha con fuerte simbolismo, porque se conmemora el renunciamiento de Evita a la candidatura presidencial, en 1951.
Entre los que defienden una CGT más dura con el Gobierno, los plazos también ofrecerían otra ventaja: la elección coincidirá, especulan, con un creciente malhumor social por los aumentos de tarifas. Sin embargo, los gremios que proponen una estrategia que no privilegie la acción combativa cuentan con el número más grande de afiliados. Más allá de los gremios de Moyano y Luis Barrionuevo, sus aliados representan a gremios medianos o pequeños, un dato clave porque el voto es ponderado en la instancia de un congreso.