Francisco convocó al Vaticano a todo el obispado chileno
Luego de las acusaciones contra sacerdotes y especialmente del desar rollo del caso del cura Fernando Karadima, se desató un vendaval en la Iglesia chilena. Algunos hitos en la tormenta fueron el viaje del Papa al país vecino y la reciente visita de tres víctimas de abuso a Roma, al cabo de lo cual el mismo Francisco solicitó el perdón por el daño efectuado. Esta semana seguirá el tema. El Pontífice llamó a una reunión que se desarrollará del 15 al 17 a la Conferencia Episcopal del país trasandino.
En el encuentro también estará uno de los personajes más polémicos de la curia chilena, el cardenal Francisco Javier Errázuriz, arzobispo emérito de Santiago y de cuestionado ministerio en los casos de pederastia descubiertos en la Iglesia católica, especialmente por defender a Karadima, que fue condenado en 2011 por la Justicia canónica a una vida de reclusión y penitencia por abusos, encubiertos por el obispo de Osorno, Juan Barros
Ayer Errázuriz viajó a Roma para reunirse con el papa Francisco.
Conclusiones. Se espera que el encuentro produzca renovaciones en el corazón de la Iglesia chilena.
“El Santo Padre, interpelado por las circunstancias y los desafíos extraordinarios que plantean los abusos de poder, sexuales y de conciencia, ocurridos en Chile a lo largo de las últimas décadas, considera necesario examinar a fondo sus causas y consecuencias, así como los mecanismos que han llevado en algunos casos a su encubrimiento y a las graves omisiones hacia las víctimas”, reza la nota oficial.
Las reuniones “se desarrollarán en estricta confidencialidad” por lo que “no está previsto que el papa Francisco haga ninguna declaración”.
El Vaticano ha subrayado que “a lo largo de los encuentros, el papa Francisco compartirá sus conclusiones personales derivadas de la reciente misión especial a Chile confiada a Charles Scicluna, arzobispo de Malta, y a Jordi Bertomeu, de la Congregación para la Doctrina de la Fe”.