La nueva oferta de Correo SA debe sortear tres frentes claves
En 2009, la corte evitó que la compañía pagara sus deudas con un inmueble. ahora, la empresa quiere repetir la misma estrategia.
La nueva oferta de Correo Argentino SA para intentar cerrar un acuerdo con el Estado y pagar sus deudas deberá sortear al menos tres frentes: un fallo de la Corte Suprema; la discusión sobre si el inmueble con el que buscan pagar realmente vale $ 1.000 millones; y si la propiedad en cuestión le pertenece o ya es parte del patrimonio del Estado. Lo que suceda en este expediente judicial es clave para el presidente Mauricio Macri y las empresas que integran el holding familiar. Correo fue el caso que disparó el principal conflicto de intereses del mandatario.
En mayo, Correo, una empresa de la familia Macri, reactivó los intentos por negociar sus deudas con el Estado, que en 2001 alcanzaban los 300 millones pesos/dólares más intereses. En esta nueva oferta, propuso pagar con un inmueble que la compañía sostiene que está valuado en unos $ 1.000 millones (para ser precisos, $ 952.256.802), como reveló PERFIL el martes. Se trata del terreno y el edificio donde funciona la planta de distribución en la localidad de Monte Grande, Gran Buenos Aires. La oferta incluye, según aclaró el abogado de Correo, Jaime Kleidermacher, el equipamiento y mejoras realizadas en el edificio.
¿Pero cuánto vale realmente esa propiedad en la actualidad? ¿Se puede realizar esa especie de trueque? Según una decisión de la Corte Suprema de 2009, no se podría. Pero la compañía lo intentará nuevamente. El valor. Fue determinado por el Tribunal Nacional de Tasación en 2009 por alrededor de $ 60 millones, con mejoras incluidas. Entonces, ¿puede valer hoy $ 1.000 millones?
Kleidermacher explicó en un escrito que no se trata del valor de mercado del inmueble sino de la “reexpresión” del valor de $ 60 millones al que se le aplicó una tasa del 11% anual. El Estado, los síndicos y la Justicia deberán establecer si ese valor es correcto, confirmaron fuentes judiciales, y si realmente alcanza para saldar el valor de la deuda de Correo.
Correo Argentino SA está en concurso de acreedores desde 2001. Mantiene deudas con el Estado por cánones impagos que datan de 1999, antes de que entrara en concurso.
La compañía inició a su vez juicios millonarios contra el Estado por falta de pago de servicios de correo y por la “expropiación” de la planta de Monte Grande.
Ahora quiere saldar sus deudas con ese inmueble, pero en 2009 la Corte ya le dijo que no era posible. ¿De quién es el inmueble? La planta de Monte Grande es eje de la disputa desde que el correo volvió a manos del Estado, en 2003. De hecho, es uno de los centros de distribución de la compañía estatal en la actualidad, pero según los papeles que presentaron los Macri la titularidad es de ellos. La planta fue construida durante la privatización y Correo inició un juicio –que sigue vigente– en reclamo de esta propiedad. ¿Qué dijo la Corte? En 2008, Correo intentó cerrar un acuerdo ofreciendo al Estado que intercambien créditos. Es decir, como Correo reclama que le paguen por la “expropiación” de la planta de Monte Grande, la compañía quiere que le tomen ese inmueble para saldar sus deudas con el Estado. Entonces, la discusión llegó hasta el máximo tribunal, conformado entonces por Ricardo Lorenzetti, Elena Highton, Enrique Petracchi, Juan Carlos Maqueda, Raúl Zaffaroni y Carmen Argibay. En 2009, la mayoría de los jueces (5 a 1) falló contra la pretensión de Correo. Se basaron en un dictamen del entonces procurador Esteban Righi, quien cuestionó la oferta considerando que Correo no podía reclamar en diversos juicios al Estado por ese inmueble más daños y perjuicios millonarios y luego proponerlo como parte de pago en otro expediente. Habló de “superposición de procesos” y “peligro de sentencias contradictorias”.
el caso