Las escenas de sexo están “CASI” COREOGRAfiADAS
Juan Vera y Daniel Cúparo fueron los guionistas del guión cinematográfico estrenado en el 2012, con dirección de Diego Kaplan. Ahora asumieron la difícil tarea de transformarlo en obra teatral, sin la posibilidad de exteriores, ni la profundidad de los primeros planos que aporta la cámara. Compartieron esta versión teatral. Pero solo Cúparo tiene recorrido teatral, además de haber estudiado con grandes docentes como Mauricio Kartun, Julio Chávez, Ricardo Bartis, Pompeyo Audivert o Nora Moseinco, sus antecedentes más importantes son los guiones de dos espectáculos para el grupo “El descueve”: Hermosura y Patito feo.
La historia de Dos más dos está centrada en estos dos matrimonios que dan el título y no hay más personajes que se sumen en el escenario. Una pareja con varios años de convivencia conoce una intimidad de sus amigos: son swingers, o sea intercambian sexo con desconocidos. A partir de ahí la tentación, los desencuentros y el conflicto.
El humor se focaliza en las diferentes personalidades de cada protagonista. Aparece como una sombra, pero jamás se profundiza en el espíritu competitivo de estos dos hombres que en lo profesional parecen no saber compartir el éxito. Esta cuenta casi pendiente tendrá su revancha en el otro orden, en el más personal e íntimo. La primera consigna de los swingers es no involucrarse en lo afectivo y no todos los consiguen, esto producirá el verdadero problema para todos.
La escenografía de Jorge Ferrari enmarca cada situación y también ubica espacialmente los distintos ámbitos con cambios muy bien sincronizados. Se suma para estos climas diferentes la iluminación de Gonzalo Córdova. El diseño de vestuario de Ana Markarian ayuda para caracterizar a cada uno. Se evidencia un gran cuidado estético en todo el espectáculo. Las escenas de sexo están casi coreografiadas y no resultan violentas sino que están al servicio de las acciones dramáticas.
La dirección de Marcos Carnevale contó con un elenco de excelentes intérpretes como Eleonora Wex ler, Fer ná n Mirás, Luciano Cáceres y Julieta Zylberberg. Además de encarnar a sus criaturas con afecto consiguen emanar una notable energía como equipo. Los momentos de mayor comicidad los tiene casi servidos Fernán Mirás, pero no solo los sabe aprovechar en la intención, sino que suma silencios y miradas cómplices a los que sus compañeros colaboran para que sea más efectivo. Dos más dos es una comedia, consigue sonrisas no tanto por la originalidad de su planteo sino por el profesionalismo y efectividad de sus intérpretes.