Cristofani, el banquero que más banca a cambiemos
Clave para aplicar medidas anticorrida, se ofrece como interlocutor con hombres de negocios. Optimismo y defensa del plan ocho años.
Plata quemada: son parte de esta infructuosa “operación salvataje”, el Banco Nación, Banco de la Provincia de Buenos Aires, Banco Ciudad, Banco de Córdoba, Banco de la Rioja, Banco de La Pampa, Banco de Santa Fe, Banco de Entre Ríos, Banco de Corrientes, Banco de Tierra del Fuego, Banco de Neuquén y el Banco Credicoop. En total, los bancos participantes se comprometieron a prestar, bajo esta modalidad, $ 26 mil millones, cada uno con una cuota de ese monto. En particular, el Banco Ciudad profundizó la reducción de tasas. Su presidente, Javier Ortiz Batalla, detalló al respecto que “el trabajo conjunto con el Ministerio de la Producción nos permite brindar financiamiento accesible a las pymes, en este caso logrando potenciar la cadena de pagos con una reducción significativa sobre la tasa de interés”. “A su vez, los proveedores de la Ciudad de Buenos Aires tendrán una bonificación adicional, quedando dicha tasa en el 27% TNA, beneficiando a una gran cantidad de empresas abocadas a la ejecución de obras públicas y servicios en la Ciudad. Asimismo, los convenios que venimos estableciendo con Sociedades de Garantía Recíproca nos permiten profundizar la inclusión financiera de microempresas”, agregó Ortiz Batalla. Por su parte, Daniel Tillard, presidente del Banco de Córdoba, señaló: “El convenio que hemos firmado hoy tiene gran importancia, a Bancor se le adjudicó el 10% del cupo nacional. Estos 2.500 millones de crédito que tendrá el banco nos permitirá apoyar a las mipymes cordobesas”. La culpa la tiene el FMI: el nuevo ministro resaltó que este anuncio está en línea con las metas fiscales establecidas por el Ministerio de Hacienda, en el marco del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, a la vez que destacó “la contribución de la banca pública para ayudar a las pymes a financiar su capital de trabajo a tasas competitivas y, por tanto, a fortalecer la cadena de pagos durante la coyuntura”. *Contador. Tributarista. “Los empresarios tenemos que participar (en el crecimiento del país) y a nosotros nos van a ver como un facilitador y protagonista de ese proceso”. El que se atribuye el rol de interlocutor con el sector privado es Enrique Cristofani, el presidente del banco Santander Río, que sigue al pie de la letra el pedido del Gobierno de mostrar una “agenda positiva”, como escribió Francisco Cabrera antes de dejar el Ministerio de Producción.
La frase resonó hace unas semanas durante un seminario de líderes y negocios entre Brasil y la Argentina. En ese momento, Cristofani –hasta ahora cultor del perfil bajo– venía de ser el anfitrión de una cena con sus pares banqueros del HSBC, BBVA, ICBC, Macro y Galicia, y los representantes del Gobierno, donde Luis Caputo fue el principal negociador. Allí acordó sostener Lebac en manos de los bancos, lo que oxigenó al Ejecutivo frente a los vencimientos.
Los banqueros, en tanto, intentaron desdramatizarlo. Si el Central mostrara en manos de quién están las letras, quedaría claro que estaban en manos de las entidades financieras, darían por terminados los “supermartes” que fueron perdiendo peso con las recompras y los anuncios.
Cristofani no solo puso la casa para las reuniones. Está entre los más optimistas frente al gobierno de Mauricio Macri y compite por ese lugar con banqueros como Gabriel Martino, del HSBC, que siempre tuvo un discurso muy alineado con las políticas oficiales.
La cercanía con el Gobierno no es reciente, de todas formas. Su banco –desde la casa central en Madrid– viene de anunciar inversiones por más de US$ 500 millones, según le dijo la titular, Ana Botín, al presidente Mauricio Macri el año pasado. Antesala. Unos años antes, había tenido un primer acercamiento a lo que sería Cambiemos de la mano de Héctor “Toty” Flores, con la apertura de una sucursal en Gregorio de Laferrere, en La Matanza, de la mano de la cooperativa La Juanita. Fue la “primera apertura de un banco de primera línea en un barrio marginal”, aseguró en ese momento Flores. Y de la mano del banco,