Más hombres deciden depilarse para lucir sus cuerpos en la playa
Destacan la higiene y la comodidad de ser lampiños, y no le temen a la cera o al láser. En los centros de estética aseguran que son casi el 50%.
“Hace cinco años que me depilo. Este verano, usé la máquina pero también me depilé muchas veces con cera: la primera vez duele, pero después te acostumbrás. A mi viejo no le gusta, mis amigos me cargan; pero mi novia me ayudó varias veces, ella no tiene problema”. Así, sin prejuicios, cuenta Andrés Rubiolo (26) por qué elige lucir su cuerpo libre de pelos. “Me depilo siempre el pecho y las piernas. Lo hago para que se me note más ‘el músculo’, pero también porque me resulta más cómodo”, dice.
Como él, en un recorrido por las distintas playas de la costa atlántica, se ve que cada vez más varones deciden sacarse el vello corporal, una tendencia que constatan los centros especializados en depilación, que aseguran que sus clientes ya casi constituyen la paridad perfecta 50/50, arman “combos” adecuados para cada tipo de hombre y aseguran que son más obsesivos a la hora de cumplir con las consignas durante los tratamientos. Y no reparan en métodos: usan tanto las máquinas de rasurar y los sistemas de depilación definitiva como el más tradicional –y doloroso–, la cera. Cualquier cosa con tal de verse perfectos.
“Aunque jugamos al rugby, lo hacemos sobre todo por estética y comodidad. Empe- zamos porque otros amigos ya se depilaban y nos lo recomendaron, y nos lo hacemos con cera en las piernas y en el pecho”, cuenta Ignacio Huaier (19), jugador en el Universitario Rugby Club de Tucumán y estudiante de Ciencias Econó- micas, que está de vacaciones en Pinamar con su hermano Augusto (22) y su amigo Mariano Suárez (22), que juega en el Jockey Club. “La verdad es que ya nadie nos dice nada, se acostumbraron. Y lo voy a seguir haciendo aunque más adela nte deje el depor te”, agrega.
Especialmente entre los deportistas, la depilación era una necesidad. Pero hoy ya no distingue actividades, y muchos resaltan que la comodidad de tener la piel lisa es lo más importante, sobre todo en verano “para no morir de calor”. El ex nadador olímpico José Meolans (40) ya se retiró pero no se imagina de otra forma que lampiño: “Me afeito el cuerpo completo cada tres semanas, aun ahora que