ESOS GOLPES QUE TARDAN EN CICATRIZAR
EL EQUIPO SANTIAGUEÑO SE LUCIO EN EL BAJO FLORES. EL CICLON DESAPROVECHO LA POSIBILIDAD DE QUEDAR COMO PUNTERO. LO DESPIDIERON CON SILBIDOS.
Central Córdoba de Santiago del Estero se dio ayer un gusto mayúsculo desde su ascenso a la Superliga, al superar como visitante por 4-1 a San Lorenzo, que vivió un clima tenso con sus hinchas previo a enfrentar a Huracán en el clásico del barrio.
El Ciclón sufrió las decisiones del árbitro Néstor Pitana en el arranque, quien obvió un claro penal sobre Ramón Arias por un agarrón y luego convalidó una posición adelantada inexistente cuando Angel Romero quedaba cara a cara con el arquero Diego Ruso Rodríguez.
Luego, a los 21 minutos, el juvenil Gianluca Ferrari vio la roja por haber cortado una oportunidad manifiesta agarrando a Jonathan Herrera, quien diez más tarde anotó el único gol del primer tiempo.
En el complemento, y pese a la inferioridad, los dirigidos por Juan Antonio Pizzi parecieron resurgir con un zurdazo del lateral Bruno Pittón –goleador del torneo–, a los 13 minutos.
Pero, expuesto el azulgrana a los contragolpes, el equipo santiagueño conducido por Gustavo Sapito Coleoni lo liquidó con un doblete de Lisandro Alzugaray y un bombazo de Marcelo Meli.
Así, el Ferroviario sumó su segundo triunfo en fila, que le sirvió para dejar la zona de descenso momentáneamente, ya que al dividir por una temporada su promedio fluctúa mucho más que el de sus rivales directos.
La preocupación quedó del lado de San Lorenzo porque, más allá de las vicisitudes del partido, Pizzi tomó decisiones fuertes durante la semana y el equipo no reaccionó dentro de la cancha.
Los hinchas azulgranas se expresaron con cánticos y abucheos al equipo, los dirigentes e incluso hubo algunos golpes de puño entre sí en la platea baja del estadio Pedro Bidegain.
Bajo este clima, San Lorenzo perdió su oportunidad de llegar a la cima, al menos hasta que juegue Boca, y luego del receso por la fecha FIFA afrontará como visitante el clásico ante Huracán, que podría ser clave para su futuro.