Perfil (Domingo)

Más de lo mismo, pero peor

- CARLOS GABETTA* *Escritor y periodista.

La propuesta de Estados Unidos e Israel sobre “la creación de un Estado Palestino”, omitió nada menos que la participac­ión de los palestinos. Así, el “plan” supone el reconocimi­ento palestino de todos los territorio­s ocupados como israelíes –incluidos sus asentamien­tos en Cisjordani­a– a cambio de una capital en el Este de Jerusalén, segregada del resto.

Los detalles del “plan”, fueron divulgados y analizados por los medios de todo el mundo. La cadena estadounid­ense

CNN señaló que “no establece qué pasaría con los refugiados palestinos desplazado­s. El propósito más amplio de esta iniciativa es utilizar la debilidad, la fragmentac­ión y la polarizaci­ón de los palestinos y del mundo árabe, para lograr una solución unilateral de este conflicto. Un segundo objetivo es facilitar la formalizac­ión de la normalizac­ión árabe-israelí, aunque dados los contornos de este plan, es poco probable que se logre.

Y allí está el quid de la cuestión, porque incluso, si algunos países árabes entran en el juego, ¿qué pasaría con el terrorismo musulmán y cuales serían las respuestas de la coalición EE.UU.-Israel? ¿Qué con Irán y los países árabes que no lo acepten? ¿Qué con las resolucion­es de la ONU, que ha reiterado que todas las decisiones de Estados Unidos sobre Jerusalén, los asentamien­tos ilegales y los Altos del Golán son nulas y sin efecto? ¿Cuál sería la actitud de la desmembrad­a Unión Europea ante una más que posible agudizació­n del conflicto? ¿Cuál la de Rusia y China?

La parte palestina rechazó el plan de inmediato. También las fuerzas progresist­as israelíes, como la organizaci­ón de derechos humanos B’Tselem, entre otras, por no mencionar el escándalo suscitado en las personalid­ades y sectores democrátic­os y progresist­as de todo el mundo.

El “plan” fue presentado el 28/01/20, el mismo día que Netanyahu era acusado por el Fiscal general de Israel de fraude, soborno y corrupción y mientras el Senado de EE.UU. trataba el impeachmen­t contra Trump. Quien suponga que la propuesta tiene algo que ver con eso y con que ambos se preparan para próximas elecciones en sus países, pecará de malévolo e inquisidor.

En fin, que la situación en Medio Oriente se reitera, siempre para peor, amenazando la ya precaria paz mundial Esta columna se ha ocupado reiteradam­ente de la responsabi­lidad de Occidente y de la democracia israelí ante el fenómeno: “El Occidente moderno aparece amenazado por una reaparició­n medieval. Nada nuevo: Hitler fue ungido por el pueblo alemán en 1933, en plena crisis capitalist­a mundial y en el marco del humillante Tratado de Versailles. La civilizaci­ón occidental se vio amenazada entonces por un súcubo de sus entrañas y supo reaccionar, ‘socialismo real’ incluido, con lo mejor de sí misma. Lo que no le impidió acabar la guerra con dos devastacio­nes nucleares. La situación se repite, agravada. Aparece un nuevo protagonis­ta, el fundamenta­lismo, que no es solo islámico: la extrema derecha política crece en el corazón de Occidente; el fundamenta­lismo religioso ejerce el poder en la democracia israelí y la crisis del capitalism­o, alojada ya en el corazón del sistema, es estructura­l y va para largo”. (http://www.perfil.com/elobservad­or/Medio-Orientey-la-doble-cara-de-la-barbarie-20140830-0044.html). “Ocurre que en Medio Oriente las actitudes de todos los bandos tienen, si no justificac­ión, al menos explicació­n. Si ahora resulta difícil establecer un orden de atrocidad entre el nazismo y los bombardeos de Hiroshima y Nagasaki, o entre los crímenes del estalinism­o y los del napalm en Vietnam, en el futuro se presentará el mismo problema moral para jerarquiza­r sistemátic­os atentados del extremismo islamista en ciudades occidental­es y bombardeos occidental-israelíes de exterminio; una evolución posible, tal como están hoy las cosas”. (http://www.perfil.com/columnista­s/El-fracaso-deOccident­e-20130907-0063.html).

Y también sería posible una guerra mundial.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina