Pruebas de anticuerpos en hospitales públicos
Uno de los problemas que deberá enfrentar el sistema de salud en las próximas semanas de pandemia es interno pero generalizado: entre el mayor grupos de contagiados, se encuentra el propio personal de salud, especialmente los de la primera línea de atención. En Argentina ese número representaba, al principio del brote, alrededor del 20% de los casos confirmados. Ahora, según el último informe brindado por Carla Vizzotti, secretaria de Acceso a la Salud, ese grupo ronda el 10% (hasta el viernes cerca de 2.800 casos).
Buscando bajarlo más, el Ministerio de Salud de la Nación presentó esta semana el Plan de Cuidados para Personal de Salud, que incluye encuestas, seguimiento y capacitación. De acuerdo al doctor Pedro Silberman, director de talento humano del equipo de Ginés González García, “ya trabajamos en más de 20 hospitales, con 5 mil trabajadores, en forma consensuada con gremios y federaciones médicas”. Según Silberman,
Las autoridades afirman que la situación de cuidados al personal de salud mejoró desde el inicio de la pandemia. Fuentes del Ministerio de Salud de CABA le aseguraron a PERFIL que “actualmente brindan todos los EPP necesarios para que se pueda atender de manera segura: barbijos, máscaras, guantes, cofias, botas, camisolines, etc”. Y desde la Provincia explican que la situación fue cambiando. “Al principio casi el 20% de los contagios era de personal de salud. Pero a medida que fuimos aprendiendo, tomando medidas y aumentando el stock de EPP, mejoramos: estamos en alrededor del 11%”, le explicó a PERFIL Enio García, jefe de asesores del ministro de Salud de la Provincia de Buenos Aires. Esta semana, en el marco de la “Ley
“el plan tiene tres ejes: medir y categorizar los riesgos en cada lugar; consensuar y normatizar medidas de seguridad y formar y dar acompañamiento a los profesionales”. Para eso están recopilando encuestas anónimas donde se pregunta sobre el proceso laboral, factores de riesgo, si trabajan con Covid, si cuentan con equipos de protección y si está capacitado y supervisado en forma
Silvio”, se diseñó –junto al equipo del Instituto de Epidemiología de Mar del Plata– una estrategia para hacer testeos en hospitales. “Utilizamos el test diseñado por el Instituto Leloir para profundizar la vigilancia epidemiológica y analizar como está circulando el virus. En función de eso, obtenemos datos que no permiten mejorar la seguridad en cada unidad”, detalló. Según García, esto es mucho más eficiente que realizar test de PCR sistemáticos, “algo que no sólo contribuye a administrar mal los recursos, sino que el exceso de testeos provoca cuellos de botella en los laboratorios y demoras en los resultados. Así se nos atrasa la toma de decisiones de aislamiento inteligente. En otras palabras, hacer tests por demás termina siendo contraproducente”.
nadecuada”. La encuesta se usa para evaluar riesgos de contagio y esa información se entrega luego a la autoridades de cada centro médico para que implementen medidas.
También la provincia de Buenos Aires lanzó el Plan Silvio –en conmemoración a Silvio Cufré, el primer trabajador de la salud víctima del coronavirus en la provincia de Buenos Aires–, un programa