EL OTRO LADO DE LA FAMILIA AMERICANA
Muchos de nosotros estamos en cuarentena con nuestras familias, con casas llenas de niños, y está bueno ver un show que es tanto para adolescentes y adultos. “Está diseñado para funcionar así” dice Amy Poehler, a la hora de hablar sobre las razones para ver Duncanville. ¿Cómo definiría Poehler el show? “Espero que entiendan que esta comedia puede ser familiar. Padres, adolescentes, Duncan. Es un show tonto de la manera más inteligente. Hay mucha acción estúpida, y eso lo digo en el sentido más poderoso del término. Más feliz del mismo. La voz es un don muy particular en la comedia, y puntualmente en la animación. Por supuesto que nadie me va a elegir para interpretar a un niño de 16 años en el mundo.
Pero ahí está la magia de la animación: poder jugar, pero poder también dar lugar a personajes que no aparecen tanto en ficciones, dar lugar a diversidad, delante y detrás de la ‘cámara’”. Poehler interpreta dos voces en el show ¿cómo se diferencian estos roles de otros que has interpretado? “En mi carrera he interpretado muchos personajes que son energéticos y que buscan llegar a determinados lugares en su carrera. Acá quería lograr todo lo contrario. Duncan es alguien que se toma su tiempo. Fui al shopping y estudié a muchos adolescentes. Eso suena un poco más pervertido de lo que quería que suene. La historia de la animación reciente, por suerte, está llena de mujeres que hacen a adolescentes que no tienen sentido.”