El punto débil: en sólo diez días ya hubo dos piquetes
A diez días de la inauguración del Metrobús de la 9 de Julio, parece haberse cumplido uno de los principales temores de funcionarios y usuarios: que los carriles exclusivos del nuevo sistema se transformen en un blanco frecuente de protestas y cortes de calles. En las últimas dos semanas el Metrobús fue cortado dos veces. El primero, al segundo día de que comenzara a funcionar, cuando trabajadores municipales municipales de la provincia de Buenos Aires blo- quearon el tránsito a la altura de Córdoba en protesta por mejoras salariales. El resultado fue caos de tránsito durante casi toda la tarde, seis detenidos y una denuncia penal del Gobierno contra los manifestantes. El último corte fue el jueves después de las 15, cuando delegados de ATE y empleados del Ministerio de Desarrollo Social de la Ciudad se instalaron en el carril mano a Retiro para denunciar precariedad en las condiciones de trabajo y exigir mejo- ras en el sueldo. En el momento, los manifestantes indicaron que la elección del Metrobús fue porque se trataba de un “símbolo del macrismo”. La Subsecretaría de Tránsito y Transporte porteño dispuso 50 agentes en moto para actuar en estos conflictos. Sin embargo, los agentes no evitan los cortes, sino que desvían el tránsito por calles laterales cuando ocurren, algo que probablemente sea bastante más seguido de lo que los funcionarios esperarían.