“Estamos cercados por viejos reaccionarios”
El cantante sacó disco que hizo con su banda. Lamenta que haya quienes critican el rock nacional contemporáneo.
Sociedad Italiana de Morón (San Martín 451). “El sonido de la banda está consolidado –dice Palo–. Es la formación ideal para la necesidad de rocanrol que me apareció en los últimos tiempos, sobre todo porque en vivo nos estábamos prendiendo fuego con los temas de Don Cornelio. Pero el otro trabajo importante es el de construir La Hermandad como colectivo. Con sus movimientos, obviamente. Pero consolidar algo, aunque sea una idea de banda. Puede haber un cambio de integrantes, pero no de idea. Busqué gente que viviera en el Oeste, como yo, para que todo fuera más fluido, más facil. Armé una banda con sentimiento territorial, lo más parecido a lo que yo siento que es el rock de verdad. El arte es un fenómeno de los dioses, y el tiempo decide qué es arte y qué no.
”Van Gogh, el artista número uno de todos los tiempos, fue reconocido tardíamente. Pero si lo que hacemos no es arte, al menos que sea una experiencia antropológica. Que deje un buen registro de este intercambio de energía entre especímenes de sexo masculino que se vinculan a través de artilugios sonoros. El desarrollo de una canción depende de si el grupo la vibra, la siente, está convencido de lo
Transformación,
que hace. Lo único importante es ese vínculo, lo demas no importa”.
— ¿Cómo sentís que fue cambiando tu relación con el rock en todos estos años?
—El rock post 90 es diferente al pre 90. La relación que tiene el público masivo con los artistas a los que sigue es diferente que la que tenía mi generación con Seru Giran, por ejemplo. De todos modos, hace mucho que trato de no tener un discurso reaccionario, no me gusta eso de que el rock no existe más, que no hay más rock o que no hay rock en Argentina. Se instaló esa idea en el post Cromañón. La imagen del rock argen- tino pasó a ser Callejeros, entonces los que no escuchaban a Callejeros decían “no hay nada”. Hablo de la gente que escuchó a Pescado Rabioso o a Sumo y que no estaba interesada en lo que pasaba en el rock argentino en ese momento. Me pareció siempre muy conservador eso. En el segundo cordón del Conurbano es todo cumbia, reggaeton, algo de Céline Dion, La Renga y Callejeros. Pasó ese desastre que pasó, se aniquiló esa imagen del rock argentino y acá estamos, cercados por viejos reaccionarios. A mí puede interesarme o no la música de Callejeros y de todo el rock chabón. Y sí estoy seguro de que llevo adentro a Litto Nebbia y a Spinetta. Pero no voy a convertirme en un reaccionario por eso.