EL SABOR Con estirpe francesa y destellos del art déco, a metros de la Casa Blanca, un hotel cinco estrellas produce su propia miel con los frutos de la zona. ¿Dónde probarla? En los tragos del bar.
Washington DC, la capital de los Estados Unidos, la ciudad diseñada para albergar la Casa Blanca y el Capitolio, aloja además a presidentes, legisladores, diplomáticos y lobbistas. Desde luego, también a turistas que quieren conocer uno de los puntos neurálgicos de la política mundial. A pocas cuadras de la Casa Blanca, un hotel se inspiró en el aire francés de la residencia presidencial en su más reciente remodelación, de 2015. En un edificio con elementos art déco, la cadena Sofitel estableció uno de sus hoteles de lujo en la esquina de la plaza Lafayette. Conocido entre los locales por la buena barra de tragos de su bar de la planta baja, el Sofitel Washington DC Lafayette Square está enmarcado por una amplia entrada y una “terraza” a la calle, con mesas que se llenan cuando llega la hora de la salida del trabajo. En el lobby, un imponente sillón esmeralda frente a los ascensores –al que los visitantes se refieren como el “sillón verde”– ameniza la espera de quienes van y vienen de alguna de las 237 habitaciones o 17 suites del establecimiento. Escenario de bodas y reuniones de negocios, tiene su propio salón de baile y un spa, para relajarse en una de las ciudades más agitadas del mundo, aunque el ritmo de vida sea ameno. Con ese fin, las cortinas gruesas de los cuartos alejan el ruido de las calles amplias de Washington. En el interior, los colores vuelven a inspirarse en la Casa Blanca e intercalan blancos, rojos y azules en tonos relajados. La sorpresa está en la terraza del piso 12, donde el hotel produce su propia miel, que puede degustarse en el bistro o en los tragos del bar. Las abejas se nutren de la flora de Washington para producir el néctar que incluye el sabor de los famosos cerezos de la zona, un festival aparte.