Homo digitalis: para cada necesidad, una aplicación
Sin cazar ni recolectar, el hombre del siglo XXI resuelve sus necesidades apretando teclas o pantallas táctiles; sentado frente a una PC o a cualquier hora y en cualquier lugar, con su dispositivo móvil.
Así como estos dispositivos fueron reemplazando objetos –el reloj despertador y el de muñeca, el calendario de escritorio, la guía de calles, las cartas que llegaban por correo postal, etc.–, también fueron centralizando actividades que pasaron del plano real al digital facilitándonos la vida.
En el trabajo: organizar la agenda del día es muy fácil con Evernote. Y para trabajar colaborativamente, a distancia, y compartir documentos está Drive, de Google, entre otros.
En las relaciones personales: Facebook evolucionó y permite videollamadas para charlar con los amigos y si se trata de encontrar pareja, ya no hace falta salir de casa: Match.com es una solución.
En tu desarrollo personal: podés desde elegir un curso guiado de meditación hasta capacitarte para tener una salida laboral y mejorar tus ingresos, tomando un curso online en Cenedi.
A la hora del entretenimiento: el cine se mete en la computadora, donde podés mirar series y películas, por ejemplo con Netflix. Y si pensás en un viaje, para averiguar y reservar no necesitás acercarte a ninguna agencia de viajes del microcentro: en Despegar encontrás todo.
En tus necesidades cotidianas: hacer tus operaciones bancarias sin colas y en cualquier horario es posible gracias al home banking y también vía el comercio electrónico.
Así, manejando cada vez más lo digital de manera táctil y móvil, con una personalidad para las redes sociales y resolviendo sus necesidades en el ciberespacio, el “homo sapiens” se hace “homo digitalis” y vive su vida desde la computadora.