El gobierno español exige la disolución de la banda
El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, respondió ayer al anuncio de la organización terrorista vasca ETA sobre su inminente desarme definitivo. “Hablando de la responsabilidad, un brevísimo comentario sobre ETA –dijo Rajoy durante una intervención en el XVI Congreso de Partido Popular (PP) en Madrid–. Mi posición, la del gobierno y la del PP es la misma de siempre: si ETA ha decidido desarmarse unilateralmente, que lo haga y que de paso se disuelva y el gobierno aplicará la ley igual para todos”. Esas palabras fueron todo lo que dijo el mandatario sobre el asunto.
El consenso sobre la necesidad de que ETA se disuelva parece ser total entre los grandes partidos políticos españoles. “Hace cinco años, ETA dejó la violencia –manifestó el ex ministro del Interior A lfredo Pérez Rubalcaba, referente del Partido Socialis- ta Obrero Español ( PSOE). A hora dice que entrega las armas. Le falta desaparecer”.
Por su parte, el actual titular de Interior, Juan Ignacio Zoido, sostuvo que “después de cinco años, ETA ha tenido tiempo más que suficiente” para el desarme y que “si no lo ha hecho hasta ahora es porque pretendía conseguir algo a cambio”. En efecto, el grupo separatista vasco intentó involucrar sin éxito al gobierno español en el proceso de desarme.