Todos esperan el efecto derrame del campo
“Ustedes están contentos porque vienen de Disneylandia”, nos dijo risueño un colega periodista a nuestro regreso de la feria la semana anterior; y en su comentario nos dejó en claro que, para los habitantes de la ciudad, el campo parece ser el único sector de la economía nacional donde todo funciona.
Dicho sea de paso, durante los días de la muestra no hubo piquetes, paros, cortes ni protestas en la miniciudad armada en San Nicolás. Lejos de eso, los visitantes y los expositores lo vivieron con expectativas renovadas, tejiendo nuevas relaciones con la esperanza de que materialicen en buenos negocios.
Y todo indica que no les fue nada mal. Ni bien cerró la feria, y a medida que avanzó la semana se dieron a conocer algunas cifras que llamaron la atención a más de uno.
“La economía argentina va a crecer 3 o 3,5% en 2017 y gran parte de ese crecimiento lo va a generar el campo”, dijo Enrique Cristófani, presidente del Banco Santander durante los días que se realizó Expoagro. Y desde el mismo banco admitieron que en 2016 su oferta crediticia para el sector creció un 43%.
“Esperamos aumentar un 20% la venta de camiones y no tenemos dudas de que el campo va a ser el gran impulsor de ese crecimiento”, adelantó Juan Carlos Janocko de Ford Camiones.
En lo que a operaciones de canje de granos se refiere, Marcos Capdepont, gerente de Agro de YPF fue muy elocuente: “Obtuvimos casi 2 mil millones de pesos en ventas de insumos traducidos en captación de granos”; y lo atribuyó claramente “al optimismo que demostró el campo en Expoagro”.
Juan Pablo Guevara, gerente de Ventas de Valtra y Challenger en Argentina reconoció que aunque aún no cerró el primer trimestre ven un crecimiento del 25% con respecto al año pasado a raíz de la “nacionalización” de algunas líneas de tractores. Y así se multiplican las apreciaciones positivas.
Pero claro, este motor que arrancó nuevamente a funcionar en 2016 apalancado por las nuevas medidas macroeconómicas, también requiere ciertos ‘ajustes’ para mejorar su performance.
Y aquí reaparece la tan mentada competitividad, que en los últimos tiempos comienza a desgastarse.
Por caso, Ignacio Tanzi, presidente de la firma de sembradoras que lleva su nombre está muy motivado con lo que puede venir. “Hace años que no se veía tanto movimiento para estas fechas”, le contó a Super Campo y recordó que a comienzos de 2017 pudo exportar a Bulgaria. Sin embargo reconoció que el tipo de cambio no es el ideal. “Necesita- ríamos un dólar de 19 pesos, pero se nos dio la posibilidad de un nuevo destino y, si bien no tenemos la rentabilidad necesaria, preferimos abrir un mercado y esperar a que se corrija el tipo de cambio para potenciar las ventas”, reconoció.
Desde la Mesa de Enlace entienden que no todo es cuestión de modifcar el tipo de cambio porque se perjudicaría la inflación. “El tipo de cambio está atrasado pero si no, se va a devaluar para no perjudicar la inflación, no hay dudas que debemos organizar cómo repartir las cargas”, dijo elocuente Dardo Chiesa, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas.
Con este panorama, decidieron (y comunicaron en conferencia de prensa en Expoagro), que en el 2017 conviene dar debate a temas determinantes para la producción que también hacen a la competitividad.
Ese es el caso de la Ley de semillas que quedó pospuesto en el 2016, de la reforma tributaria integral para el sector agropecuario; de la necesidad de contar con un seguro multirriesgo y especialmente de abordar seriamente el tema de la lechería, tan complicada en los últimos meses. “La fortaleza de la Mesa de Enlace pasa por enfocar estos puntos de agenda y lograr que se los debata. Los tiempos políticos no son los tiempos de los productores”, alegó Dardo Chiesa.
En definitiva, los productos argentinos que provienen del campo son reconocidos en el mundo por su calidad, sin embargo reclaman la competitividad que puede llevarlos a las góndolas del mundo en igualdad de condiciones. “Si los vinos chilenos ingresan al mercado norteamericano con 0% de arancel por un acuerdo preferencial, es imposible competir frente al 35% que deben pagar los vinos argentinos”, explicó Luis Miguel Etchevehere de la Sociedad Rural Argentina. Y analizar esos acuerdos de preferencia hace tanto a la competitividad como el tipo de cambio.
Desde Super Campo estamos convencidos de que este motor imparable del campo tiene aún grandes logros por conquistar en el futuro. La revista, que acompaña mensualmente al hombre de campo desde hace más de 23 años, ahora desembarca con este suplemento semanal y se suma a la inmediatez de nuestra web y redes sociales. Distintos formatos para atravesar todas las audiencias y todas las edades. Argentina es sinónimo de campo, de alimentos, de biotecnología, y ahora también es sinónimo de futuro. El que viene de la mano de las energías renovables, de la biomasa, los alimentos nutracéuticos y tantos otros desarrollos. El futuro está en estas páginas. Los invitamos a conocerlo.