Perfil (Sabado)

Un actor que escapa a los clichés de los viejos gruñones en el cine

- JUAN MANUEL DOMÍNGUEZ

Un éxito del público en Suecia finalmente llega a Argentina. Eso por lo pronto implica, en su presentaci­ón al menos, una película que toma la fórmula del viejo gruñón viudo de la casita de al lado y la muta en una mezcla sincera, pero con tropezones, entre sentimient­os y patetismos.

La idea de base que empuja la trama es clásica para el cine de todas las latitudes, por así decirlo: un vínculo que más allá de su resistenci­a se va generando entre Ove (el anciano gruñón del caso) y sus vecinos, sobre todo con una viuda joven.

El problema central al que se puede acusar a este film europeo –que se pensaría escapa a los convencion­alismos del mainstream norteameri­cano– es que los abusos de esa rutina entre el viejo y sus vecinos son en gran parte despojados de peso gracias a la intensidad poco tóxica de nombres como el del actor Rolf Lassgård.

Es el director quien sabe cómo reaccionar, seguro, y hay que reconocer que lo intenta, pero es Rolf quien contiene antes de detonar, quien hace genuino lo que en otros casos desbarranc­aría en un exceso lacrimógen­o.

Lo cierto es que el film no se ahorra ningún lugar común, ni tampoco su explotació­n casi minera del mismo, pero ahí es donde Rolf resiste lo que el guión abraza y lanza como bala de cañón. Es ahí donde lo que el actor resiste hasta que la realidad comienza a abollar sus ganas de aguantar. Entonces lo que una película americana mastica y hace chicle globo hipermasti­cado, aquí deviene un reflejo perverso de original, una copia con poder pero difícilmen­te nueva, o incluso regenerada para ser cómoda a los ojos ajenos. Eso no anula el trabajo de sus actores, quienes le dan corazón y fuerza a una película que se obsesiona por no darles talento alguno frente a este relato. Hay actores que dignifican, pero no pueden hacer milagros.

 ?? MIRADA DISTRIBUTI­ON ?? DESTACA. El sueco Rolf Lassgård logra evitar que la película caiga en un pantano lacrimógen­o.
MIRADA DISTRIBUTI­ON DESTACA. El sueco Rolf Lassgård logra evitar que la película caiga en un pantano lacrimógen­o.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina