“El feminismo conciencia general buenísima”
Debuta como directora y guionista en la película por la que obtuvo el galardón a la Mejor Actriz en Sundance. Cree que hay muchas fobias en la sociedad.
La anécdota de Valeria Bertuccelli, que estrena el 22 de marzo su ópera prima como directora, La reina del miedo (estrenada y celebrada en el reciente Sundance), la anécdota, decía, donde define el miedo y cómo enfrentarlo implica volver a su infancia en San Nicolás. Es el típico terror infantil, la sombra que confirma nuestro insomnio, y papá llegando, prendiendo la luz y mostrando que no había más que pañales de tela colgados de una silla. Bertuccelli es la actriz que definió gran parte de la comedia mainstream en nuestro cine ( Me casé con un boludo, Un novio para mi mujer) así como la que ha logrado un renombre que no escapa de sus elecciones ( Escenas de la vida conyugal, junto a Ricardo Darín). Ahora decide animarse, volver a esos días donde ella también llevaba las riendas creativas y contar días terribles, apurados, de despedidas, de una actriz (con fama similar a la de ella, pero sin ser ella) a punto de estrenar una obra enorme y en plena crisis de pareja.
—¿Por qué el miedo? ¿Qué fue lo que te atrajo de contar el miedo de forma cotidiana, el miedo a situaciones que hacen al día a día de una actriz famosa a punto de estrenar una obra grande?
—Me gustaba mucho la idea del miedo como motor, lo que te impulsa a hacer el miedo. Hay dos cosas: que te paralice o que te haga atravesarlo. Por lo general, o en mi caso, intento atravesarlo porque si no, quedás aplastado por la vida. Veía situaciones en las personas, digo, cada vez que observo a alguien con miedo me parece interesante. ¿Viste cuando dicen que por miedo a la muerte de un hijo los padres pueden levantar autos para salvarlos? Me gustaba la idea del miedo como motor. —En la película aparecen los miedos personales de tu protagonista, pero también los miedos de la sociedad, como la inseguridad o el productor con el te- mor de perder dinero. ¿Pensás que somos una sociedad con miedos?
—Sí. El miedo siempre frena. Me parecía que detrás de esos miedos sociales está lo personal, siempre. Por ejemplo, ella cuida un árbol, y no sabe si está vivo o no, y eso es algo que en su vida es fundamental. ¿Viste cuando escuchás de alguien que estuvó mucho tiempo al lado de un enfermo y cuando justo se va, el enfermo muere, como si eligiera hacerlo en ese momento? Con el representante también, si bien aparece el miedo de la plata, ella está desesperada y no se anima a decirle que hay algo más importante: ¿en serio no vale una vez en la vida la pena patear el tablero y quedarte donde debés estar? Son situaciones donde hay un miedo social, al fracaso o lo que sea, pero detrás hay siempre una persona que quiere explicar un miedo profundo, pero que le da vergüenza, que nos da vergüenza.
—¿Qué descubriste de tus miedos, considerando que hay mucho de la vida de la actriz del film que podría leerse cerca de tus experiencias (la previa a un estreno, por ejemplo)?