Desde la estación terrena de Córdoba se comandará el satélite Saocom 1A
El lanzamiento estaba previsto para hoy, pero por pedido de SpaceX se postergó para
La investigadora principal de la misión Saocom, Laura Frulla, de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae), ya lo había advertido: “El lanzamiento del satélite es como un parto, la fecha puede variar en cualquier momento” y fue así como la empresa SpaceX comunicó el cambio de fecha para poner en órbita al satélite Saocom 1A, que pasó de hoy para mañana o el próximo jueves.
Para estar preparados, en la Estación Terrena Córdoba, localizada en el Centro Espacial Teófilo Tabanera de la Conae, ya ajustaron el reloj que marca la cuenta regresiva para este domingo. “Es parte de nuestro día a día ver ese reloj”, afirma el ingeniero Lucas Bruno, responsable de Operacione, quien explica que durante los días previos al lanzamiento se verifica que las estaciones distribuidas en distintos lugares del mundo estén operando bien.
“Esas pruebas empiezan desde el cuarto día hasta el día anterior al lanzamiento. Luego, 12 horas antes, se enciende el satélite y se verifica que esté bien, al igual que las estaciones”, asegura. Las últimas pruebas se hacen dos horas antes hasta llegar al control más estricto, a los 30 minutos previos “porque ahí no hay vuelta atrás, salvo que haya algún problema”, aclara.
Desde Córdoba se concentrará la operación del satélite, se bajará la telemetría que muestra su estado de salud y se enviarán los comandos. “El satélite nos dará una pasada de entre 10 y 12 minutos y en ese tiempo tenemos que conectarnos, ver cómo está, decirle lo que tiene que hacer y bajar los datos”, detalla Bruno.
Quince minutos después del lanzamiento desde la base Vandenberg de la fuerza aérea estadounidense en California –y de que se separe del Falcon 9 de SpaceX–, el satélite quedará en manos de ingenieros argentinos. “En la primera pasada, que tenemos sobre Tahití, esperamos ver el estado del satélite y en función de eso empezamos a organizar lo que vamos a hacer en la siguiente”, describe la ingeniera de vuelo Laura Moreschi, quien desde chica tenía decidido trabajar en la actividad espacial.
Una vez que se abran los paneles solares y se produzca la comunicación con las estaciones terrenas, el segundo momento crítico será el despliegue de los siete paneles de la antena radar de 35 metros cuadrados que esperan se realizará en el segundo día. La operación tomará unas 15 horas, ya que se aprovechará los momentos en los que el sa- télite esté “a la vista” de alguna de las estaciones terrenas.
“Ya hemos testeado el lanzamiento en distintas oportunidades y siempre que lo simulamos sentimos la adrenalina, así que imaginamos que cuando se lance el satélite la sensación será exponencial”, comenta Moreschi. En esas simulaciones también realizaron fallas inducidas para responder rápido ante las contingencias que puedan surgir. “Todo el trabajo viene acompañado de festejos cuando sale bien y de una reacción rápida cuando aparece algo”, concluye.