Detienen a dos presuntos testaferros del ex secretario de Kirchner
La causa de los cuadernos de la coimas sumó ayer dos nuevos detenidos. Se trata de dos presuntos testaferros de Daniel Muñoz, el fallecido ex secretario de Néstor Kirchner, y de su mujer, Carolina Pochetti.
Las detenciones se produjeron en México y en la frontera de ese país con Estados Unidos, durante la mañana de ayer. En tanto que a partir de ahora comenzará el trámite de extradición para que sean traídos a la Argentina, para ser indagados por el juez Claudio Bonadio, quien ordenó sus detenciones hace casi un mes.
En el despacho del magistrado se acumula tanto la investigación que comenzó tras la aparición de las anotaciones de Oscar Centeno como la de lavado de dinero que involucra, entre otros, a Pochetti y los dos nuevos detenidos: Perla Aydeé Puente Resendez y su marido Carlos Adolfo Gellert.
Puente Resendez es mexicana y fue detenida en la ciudad de Reynosa, en México, mientras que su marido fue capturado en la frontera, cuando buscaba reingresar a Estados Unidos. Las detenciones las dieron a conocer a través de la cuenta de Twitter de la Procuraduría General de México (PGM).
Gellert es primo hermano de Pochetti, y junto a Puentes Reséndez, su mujer, residían en Estados Unidos. Fue precisamente Puentes Reséndez quien asumió como directora de una de las sociedades investigadas en la causa por lavado que involucra a Pochetti y Muñoz.
La asunción se produjo tras las renuncias de Sergio Todisco y su ex esposa María Elizabeth Ortiz Municoy, vinculados a Muñoz y Pochetti y sospechados por la Justicia de ser testaferros del matrimonio. Ambos también fueron detenidos por orden de Claudio Bonadio, luego se convirtieron en imputados colaboradores, y ya fueron excarcelados.
En la causa de lavado, Pochetti, y todos los involucrados, están acusados por el fiscal Carlos Stornelli, de haber “conformado una estructura jurídica, societaria y bancaria”, para lavar dinero de origen ilegal” –según documentos enviados desde Estados Unidos– ese dinero se habría introducido a través de la compra de 16 propiedades entre Miami y Nueva York.
Pochetti y los restantes involucrados quedaron bajo investigación luego de que se destapara el caso de los Panamá Papers, que reveló que Muñoz había contratado al estudio Mossack Fonseca para crear una firma offshore.