“HAY QUE ASFIXIAR A BOCA”
Cómo se juega un partido con tanta presión como esta finalísima?
—Con mucho nerviosismo, sobre todo en la previa por todo lo que se habla y lo que significa una final histórica de la Copa Libertadores. Los nervios y la presión van disminuyendo a medida que van pasando los minutos, y una vez que el jugador está calentito desaparecen. —¿Cómo debería plantear el partido River?
—Como siempre, saliendo a hacer el juego que más les gusta a Gallardo y a los hinchas de River, que pasa por jugar con la pelota contra el piso, presionar al rival en todos los sectores y abrir muy bien la cancha para atacar por las puntas y aprovechar los centros para los buenos cabeceadores que tiene arriba.
Creo que por ahí va a estar la clave. Claro que atrás vamos a tener que estar muy atentos porque ellos tienen delanteros muy rápidos y peligrosos. A Boca hay que asfixiarlo en toda la cancha. —¿Qué partido te imaginás?
—Los técnicos van a tener mucho que ver en cuanto a la planificación y a la estrategia que hayan elegido. Un clásico es un partido aparte, único, poco vistoso, pero jugado con el corazón y el alma.
—¿Qué recordás de aquella primera final ante River en 1976?
—Cuando volvía manejando a mi casa en Martínez me crucé con una caravana de autos con hinchas de Boca que iban festejando. Lo primero que atiné a hacer fue ponerme un sombrero y agachar la cabeza para que no me reconocieran y me insultaran.