Los remates industriales suben un 15% por el cierre de firmas
Textiles y autos tienen más de la mitad de la fábrica ociosa. El uso de capacidad instalada está 20 puntos por debajo del récord de 2011.
Por la recesión, la industria trabaja usando el 60% de la capacidad instalada de sus máquinas. En algunos sectores, como el textil, se usó solo el 44% en noviembre, como en automotrices y autopartistas. Y sin recuperación del mercado interno a la vista, algunas fábricas sacan sus máquinas a remate. Desde 2015, los remates industriales crecieron 15% por el cese de pymes, según datos del martillero Adrián Mercado, CEO del grupo que lleva su nombre.
“Tenemos la mitad de la fábrica parada y me llaman otros textiles para ofrecerme sus máquinas”, explicó un empresario del sector. “No hay quien las compre porque hoy todos tenemos gran capacidad ociosa. Algunas van a remate, pero se terminan liquidando por poco”, explicó. “Lo que termina pasando es que van a desguace. Se venden como chatarra”.
En promedio en el año se realizan unas 300 subastas privadas. “En general, se llega a esta situación por cese de actividades. Se puede decir que un 80% de las máquinas y equipos que se subastan es por cese de actividades. Lo mismo sucede con los rodados”, detalló Mercado a PERFIL. “Debido a la crisis económica, la devaluación y la inflación algunas empresas cerraron sus puertas y remataron los bienes”, agregó.
La otra opción es la obsolescencia, aunque es más difícil que haya oferentes en esos casos. “En un porcentaje menor, los remates que se realizan son por su estado, que ya no se pueden utilizar”.
En los remates, los compradores, la mitad son bolseros o revendedores que aprovechan las oportunidades y siempre están atentos a lo que pasa en el mercado. El resto son pymes que ven la posibilidad de conseguir una máquina a menor precio. “Son empresas que lo hacen apostando a futuro y otros que crecen por falta de competencia”, señaló Mercado.
Los datos de uso de capacidad instalada del Indec mostraron que el promedio industrial es del 63,3% a noviembre. Junto con textiles y autos, edi- ción e impresión (56,1%), los productos de caucho y plástico (51,6%) están por debajo de ese promedio.
El uso de las máquinas industriales está 20 puntos por debajo de 2011, cuando la industria mostró un uso récord, del 83%. Y la inversión no se amplió: en los últimos once meses, cayó 4,3% según datos de Orlando J. Ferreres.
Inmuebles. También los galpones y las plantas salen a remate. Pero además hay un mercado de compraventa específico, que hoy está parado. “En este momento en el rubro inmuebles hay muy pocas operaciones, tanto en ventas como en alquiler, en el primer caso por la falta de crédito. Hoy el mercado tiene oportunidades solo para inversores que tienen el dinero y quieren destinarlo al ladrillo.
Para este año el escenario “es incierto por ahora”. En un año con protagonismo político por las elecciones presidenciales, el martillero no pierde la esperanza de que “se recomponga la confianza y vuelvan las inversiones”, pero advierte que al pequeño ahorrista o consumidor seguramente le llevará más tiempo volver al mercado “porque su recuperación había sido gracias al crédito que por ahora sigue paralizado. Si este volviera a ponerse en marcha seguro tendríamos un panorama más dinámico”.