EE.UU. retira armamento de Siria, pero no tropas
Uno de los responsables del Pentágono aclaró que si bien se está avanzando en la salida de material militar “esencial”, aún no regresarán los efectivos. Donald Trump había proclamado la derrota de Estado Islámico.
Un vocero de la coalición internacional militar liderada por Estados Unidos informó ayer que Estados Unidos comenzó “el proceso de retirada de Siria”, pero el Pentágono informó que, por el momento, se trató de la salida de material militar “esencial”. “No estamos retirando tropas en esta etapa”, expresó un responsable del Pentágono, ayer, con el fin de aclarar que Estados Unidos comenzó a retirar material militar de Siria, pero aún no tropas.
Interrogado sobre la salida el jueves pasado de unos 150 soldados estadounidenses de la base militar de Rmeilan, en la provincia de Hassake (este), mencionada por el director del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), Rami Abdel Rahman, el responsable del Pentágono indicó que se trataba de simples movimientos de tropas. “Las tropas entran y salen de Siria regularmente –aclaró–. Todavía no se ha re- “Las tropas se mueven con regularidad. No se ha retirado ningún soldado.” tirado ningún soldado, pero sí material esencial”.
El pasado 19 de diciembre, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la retirada de los 2 mil soldados estadounidenses de Siria y afirmó que Estado Islámico había sido derrotado, a pesar de que sigue controlando una pequeña zona del este del país.
Desde la coalición, que fue creada esencialmente en 2014 para luchar contra el grupo yihadista, aclararon que por motivos de seguridad no se revelarán los plazos, lugares ni movimientos de las tropas. Según el director del OSDH, “fuerzas estadounidenses se retiraron el jueves por la noche de la base militar de Rmeilan”, en la provincia de Hasaka.
La coalición liderada por Washington tiene otras bases en el noreste de Siria, igual que en el vecino Irak, donde Trump dijo que permanecerán las tropas de su país. Además, Reino Unido y Francia que forman parte de la coalición, por el momento no dijeron si la retirada incluye también las tropas francesas y británicas desplegadas en el terreno.
El inicio del retiro del armamento estadounidense de Siria coincide con la gira que realiza el secretario de Esta- do de Estados Unidos, Mike Pompeo, por ocho países de Medio Oriente, para enviar un mensaje a sus aliados árabes sobre la lucha contra el grupo terrorista.
Los kurdos. Por su parte, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una milicia árabo-kurda que cuenta con el apoyo de Washington, está tratando de desalojar a los yihadistas de EI de sus últimos bolsones de resistencia, en el valle del Eufrates. Esta retirada deja a los aliados kurdos más expuestos que nunca. Por eso, han tenido que ampararse en el régimen de Damasco –a costa de sus planes de mayor autonomía en el norte del país– para garantizar su supervivencia frente a las amenazas turcas.
En efecto, Turquía reiteró el jueves pasado su amenaza de una ofensiva contra estos combatientes kurdos de Siria, a los que considera “terroristas” y aliados de los kurdos turcos del PKK, que llevan a cabo una insurrección contra el Estado turco desde 1984. Siria. La retirada de Siria, donde Rusia e Irán están implica- dos militarmente en apoyo del régimen de Damasco, parece ir en contra de la intención de frenar la influencia iraní y de proteger a Israel. En todo caso, el anuncio de la retirada militar de Estados Unidos de Siria va a suponer, según los observadores, una redistribución de fuerzas y alianzas en la ya complicada región.
“El daño ya está hecho. En el terreno, el anuncio de la retirada de Estados Unidos tiene los mismos efectos que si la retirada ya se hubiera producido”, afirma Fabrice Balanche, geógrafo experto en Siria.
La controvertida retirada, anunciada por sor pre- sa en diciembre por Donald Trump, se percibe por algunos observadores como la muestra de las contradicciones de la estrategia de su administración, o incluso la ausencia de estrategia, según sus detractores.