Xi prometió transparencia para la Nueva Ruta de la Seda
El presidente chino convocó en Beijing a decenas de líderes para defender su iniciativa, cuestionada por los EstadosUnidos.
Nor mas de “alta calidad”, pero además “sostenibilidad comercial y fiscal de los proyectos para que puedan cumplirse los objetivos”, “cooperación abierta, verde y transparente”, con “cero tolerancia a la corrupción”: así será la Nueva Ruta de la Seda, según prometió ayer Xi Jinping.
De ese modo, el presidente chino salió al cruce de los ataques y reparos a su proyecto, un ambicioso plan lanzado en 2013 para construir infraestructuras y conectar comercialmente a países en desarrollo de Asia, Africa y Europa.
El líder de la segunda economía mundial celebró ayer por segunda vez en Beijing una cumbre dedicada a su proyecto, a la que no asistió ningún representante de Estados Unidos.
El objetivo es apuntalar las relaciones entre el gigante asiático y sus principales socios comerciales, a los que necesita para asegurarse tanto sus suministros como sus mercados.
Pero los críticos le reprochan que favorece ante todo a las empresas chinas y que los proyectos representan “una trampa para la deuda” de las naciones beneficiarias de los préstamos concedidos por los bancos chinos.
Washington tilda la iniciativa de “proyecto vanidoso” y cargó contra Italia cuando se desmarcó del resto de grandes economías y se sumó a ella.
Un ejemplo de manual es el de Sri Lanka que, al no poder cumplir con los reembolsos, tuvo que ceder a Beijing el control de un puerto en aguas profundas durante 99 años.
Frente a Vladimir Putin y cuatro decenas de mandatarios mundiales más que asistieron al encuentro, Xi, sumido en una guerra comercial con Estados Unidos, se posicionó en contra del proteccionismo.
En el discurso inaugural del segundo Foro sobre la Iniciativa Belt and Road (como se conoce en inglés al proyecto también llamado la Nueva Ruta de la Seda), el presidente chino dedicó menos de media hora a su criatura. De hecho, gran parte de su discurso se centró en el frente interno: reformas para una mayor aper tura, solución de la cuestión irritante de los subsidios estatales, protección de los derechos de propiedad intelectual, más inversiones extranjeras en diferentes sectores y compromiso contra la devaluación competitiva del yuan.
Xi Jinping defendió unos proyectos que sean “viables” para los presupuestos de los países participantes.
“Todo debe hacerse de forma transparente y debemos tener tolerancia cero con la corrupción”, afirmó.
Según el presidente chino, su país promoverá también el desarrollo “verde”. A lgunos proyectos, como las represas y las centrales de carbón, son considerados en ocasiones malos para el medio ambiente.
Del encuentro participó la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, que advirtió que las inversiones con el sello de Nuevas Rutas de la Seda “solo deben ir adonde sean viables” y pidió “licitaciones abiertas y competitivas”.