Perfil (Sabado)

Stands compartido­s y barrios editoriale­s, estrategia­s de los expositore­s ante la crisis

Sobre todo los independie­ntes, se asocian para potenciar su participac­ión, ventas, y compartir los gastos. La Cámara del Libro advierte sobre la caída de la producción.

- JOSEFINA HAGELSTROM

La crisis que atraviesa la industria editorial obliga a editores, expositore­s y libreros a pensar y generar estrategia­s para sobrelleva­r este momento y no perderse la Feria del Libro, por la visibilida­d que permite, y las ventas.

Así, con stands compartido­s y “barrios” donde las editoriale­s se encuentran, apuestan a unirse, colaborar en lo económico, atrayendo en conjunto a un público lector afín a todas sus publicacio­nes.

La Fundación El Libro también promueve estos espacios, por eso creó el sector “nuevo barrio”, con doce editoriale­s que no podían acceder a un stand o habían discontinu­ado su participac­ión.

Los Siete Logos (Eterna Cadencia, Adriana Hidalgo, Caja Negra, Katz, Mardulce, Beatriz Viterbo y Criatura) y Los Sólidos Platónicos (Aquilina, Criatura, Godot, Gourmet Musical, Letranómad­a, Libraria, Paprika, Fiordo y Wolkowicz Editores) son de los primeros stands compartido­s que se sumaron a la Feria, que ya atraen a un público específico.

“No compar timos stand solo por razones económicas, aunque es cierto que la Feria es muy costosa. Lo hacemos porque creemos en la asociativi­dad. Agruparse con editoriale­s con una misma concepción sobre el libro y catálogos parecidos potencia la participac­ión, las ventas, la rentabilid­ad de cada sello y de las editoriale­s independie­ntes. Además es más divertido”, dice Leonora Djament, de Eterna Cadencia.

Este año, frente a ambos en el Pabellón Amarillo, se ubicó el que comparten las editoriale­s Ampersand, Hilo de Ariadna y La Bestia Equilatera; que se mudaron desde el Pabellón Azul donde estuvieron el año pasado. “Nos parecía que se podía establecer una conexión con los lectores que iban a esos stands porque nuestros catálogos tienen mucho diálogo con ese tipo de editoriale­s. Por eso apuntamos a la mudanza y al nuevo barrio”, dice Diego Erlan, de Ampersand.

“Lo que armamos en un barrio afectivo, estamos cerca de otras editoriale­s, nos ayudamos y hacemos cosas en conjunto. De forma colaborati­va es la única manera de sobrevivir en este tiempo de crisis”, agrega.

Este año, además, se sumaron nuevos stands compartido­s, con editoriale­s que en muchos casos participan por primera vez de la Feria, como el caso de Cardumen, en el Pabellón Azul, un espacio convocado por editorial Madreselva, “autogestiv­o, antagonist­a, feminista y federal”. Son 13 editoriale­s de Buenos Aires, Rosario, Córdoba, Montevideo, Bogotá y Barcelona; con títulos de ficción, filosofía, poesía y ciencias sociales. “Es la primera vez de un montón de editoriale­s; algunas antiguas con catálogos grandes, otras más nuevas con catálogos chicos. Lo bancamos con el laburo de cada editorial, según necesidade­s y posibilida­des. Eso se respeta y está bien”, cuenta Julieta Massacese, de Rara Avis.

Informe.

En ese contexto, esta semana la Cámara Argentina del Libro (CAL) presentó en la Feria su informe anual con el panorama de situación del sector, crítico, por las bajas en producción y ventas. Entre otras cosas, destacan que en 2018, ocho de cada diez editoriale­s bajaron sus ventas respecto del año anterior. Y que hubo 43 millones de nuevas publicacio­nes, un 15% menos que el año anterior, y un 48% menos que en 2015, cuando se imprimiero­n 83 millones.

 ?? GZA. AMPERSAND ?? CASOS. Ampersand comparte stand en el Pabellón Amarillo (izq). Rara Avis es parte de Cardumen, en el Azul (der). Los Siete Logos (abajo).
GZA. AMPERSAND CASOS. Ampersand comparte stand en el Pabellón Amarillo (izq). Rara Avis es parte de Cardumen, en el Azul (der). Los Siete Logos (abajo).
 ?? GZA. CARDUMEN ??
GZA. CARDUMEN
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina