Las cinco claves para entender el futuro de la videovigilancia
El manejo de la información que captan las cámaras de seguridad se vuelve clave. Del reconocimiento facial a los drones. Datos.
Ya hay toda una generación de desarrollos vinculados a la seguridad, que apuntan a la premisa de ciudades inteligentes y funcionales a toda su población. En lo que es videovigilancia, es esencial conocer los nuevos avances que se vienen:
1. La integración de los sistemas.
La combinación de equipos y sistemas de videovigilancia ofrece mayores garantías en términos de seguridad. Esto es posible con redes de datos y de información que permiten conformar bases y registros de una, o varias, zonas geográficas; conectar directamente con autoridades o fuerzas de seguridad cercanas, o tomar decisiones rápidas a distancia, en cuanto ocurra algún suceso que ponga en riesgo la integridad de las personas.
2. Los algoritmos embebidos en los productos.
El deep learning sumado en diferentes dispositivos aporta un gran apoyo para la eliminación de falsas alarmas, por ejemplo. Suele ser un inconveniente habitual en el mercado de la seguridad: la rama de un árbol, cambios de luz, y demás; por lo que cuando se generan demasiadas falsas alarmas, el sistema ya no es confiable y no es apto para los clientes. La inteligencia artificial brinda elementos de confiabilidad en sistemas, ya que permite diferenciar personas, animales y objetos, y establecer parámetros que mejoran las coberturas.
2. Las funcionalidades como el reconocimiento facial o de patentes.
El reconocimiento facial permite el análisis de imágenes y determina la coincidencia con una cara humana. El sistema captura su posición, tamaño y expresión, y la transmisión de video juzgará si hay un rostro humano. Si es así, la posición, tamaño y características principales serán registradas y podrán compararse con otros rostros humanos grabados en una base de datos, y así identificar al individuo en específico. De forma similar, el reconocimiento de patentes permite el registro en el sistema de las matrículas que poseen alguna irregularidad.
4. Más allá de los sistemas cerrados de TV.
Si bien los circuitos cerrados de televisión (CCTV) siguen teniendo demanda, los dispositivos como los drones o los sistemas de escaneo vehicular, brindan más y mejor información. Los drones son fáciles de operar, cuentan con alta flexibilidad, eficiencia y adaptabilidad, permiten una perspectiva global envolvente de vigilancia 3D con múltiples ángulos, y expanden ampliamente el rango de cobertura, gracias a su autonomía de vuelo. Y en el caso de los sistemas de escaneo vehicular (por sus siglas en inglés, UVSS), se utiliza como detector para chasis, que inspecciona por debajo de los vehículos, para la detección de partes u dispositivos anómalos o peligrosos.
Cabe mencionar también un desarrollo más reciente, Postes de Alarma en la vía pública, que están equipados para transmitir datos, activar y apagar sirenas e incluso contactarse con el 911 ante una emergencia.
5. La mejora en la calidad de vida por el uso de todo esto.
Entender el futuro de la videovigilancia en la actualidad tiene que ver con la cantidad de opciones que aportan soluciones en diferentes ámbitos de seguridad ciudadana, como en educación, entretenimiento, instituciones financieras, energía, administración pública, sanidad, hotelería, joyería, residencial, industrial, telecomunicaciones, transporte y estadios.