Jefe policial detenido.
Es el comisario Mariano Valdés, de la Federal de Santa Fe. Lo acusan de denunciar un falso atentado en su contra.
La causa que investiga el ataque a tiros que sufrió el jefe de la Delegación Santa Fe de la Policía Federal Argentina (PFA) dio un giro inesperado. Los detectives están convencidos de que la víctima mintió y ocultó información, por lo que ordenaron su detención y la del segundo encargado de la repartición.
Fuentes judiciales confirmaron a PERFIL que el comisario Mariano Ezequiel Valdés (51) y el subcomisario Higinio Alberto Bellaggio (42) fueron arrestados ayer por la tarde en la sede policial, luego de un nuevo allanamiento. ¿El motivo? Incumplimiento de deberes de funcionario público.
El lunes 9 de septiembre a las 21.30 Valdés recibió dos balazos: uno en el brazo derecho y otro en la ingle. Según su versión, lo atacaron tres encapuchados en la autopista Rosario-Santa Fe, cuando frenó su Ford Focus en la banquina porque su acompañante, la suboficial Roxana González (27), había volcado el mate. En su declaración recordó que uno de los agresores le dijo “dame todo”, como si se tratara de un robo. ¿Dijo la verdad?
Además, el comisario aseguró que hirió a uno de los agresores, pero en los hospitales de la zona no hay registro del ingreso de una persona herida de bala.
El fiscal Matías Edery, de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos, explicó que detectaron “inconsistencias en sus declaraciones” y aclaró que el otro jefe policial arrestado habría estado en el lugar del ataque minutos después de que Valdés fuera herido.
“Todo está relacionado con el hecho de la autopista”, señaló el funcionario judicial, y amplió que la hipótesis del robo que planteó el comisario baleado “está descartada”, al igual que la teoría que planteaba un problema personal entre los ocupantes del auto.
Voceros del caso señalaron que la principal sospecha es que Valdés se bajó del auto y fue al encuentro de otras personas que se encontraban en una camioneta. No le dispararon a un costado del vehículo, como manifestó en su declaración, sino que lo hirieron atrás del coche.
“Habría tenido un encuentro con personas que conocía, primero una charla y luego una discusión; con posterioridad se produce el enfrentamiento que después continúa con el comisario repeliendo y entrando al auto”, explicó Edery.
Respecto de la participación de la suboficial González se informó que la mujer solo fue testigo del hecho y “hasta podría haber sido víctima”.
Para los investigadores del caso el jefe policial herido conoce a sus agresores