El reparto de Biden que movilizó a la Casa Rosada a cerrar otros acuerdos
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció semanas atrás que su país donará quinientos millones de vacunas contra el coronavirus durante el próximo año a 92 países de ingresos medios y bajos “sin condiciones, presiones o potenciales concesiones”, en lo que calificó como un anuncio “histórico” realizado durante su visita al Reino Unido en el inicio de su primer viaje al extranjero. Las vacunas que donará Estados Unidos formarán parte de la entrega de 2 mil millones de dosis que el Covax se comprometió a distribuir este año en todo el mundo y ayudarán a alcanzar la meta de 1.800 establecida para el 2022.
“Esto es sin condiciones, presiones o potenciales concesiones. Lo hacemos para salvar vidas”, destacó Biden en la localidad inglesa de Carbis Bay, en la víspera del inicio de la cumbre del G7 en la que instará a que otros líderes también repartan las vacunas sobrantes.
El demócrata calificó de “histórico” el anuncio que se suma a las ochenta millones de dosis de Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson que también serán donadas como parte de un plan dado a conocer la semana pasada y a las que se podrían sumar unas sesenta millones de dosis de Astrazeneca que Estados Unidos tiene en su territorio sin utilizar. Desde el inicio de esa campaña de inmunización, Estados Unidos priorizó a su propia población al utilizar de forma masiva los fármacos que producen sus laboratorios e imponer barreras de exportación a las propias vacunas y a las materias primas que se necesitan para su exportación.
Con casi 372 millones de dosis distribuidas en el país y cerca de 305 millones administradas, la Casa Blanca cambió su política: hace un mes anunció su apoyo a la exención temporal de patentes que con lentos avances se debate en la Organización Mundial de Comercio y hoy profundiza su esquema de donación.