Una charla de Fernández y Santoro por su candidatura
El Presidente quiere al dirigente radical en la boleta y resiste el pedido del PJ porteño por Marziotta, que quiere que encabece.
El jueves por la tarde Leandro Santoro ingresó a la Casa Rosada para ver a Alberto Fernández y se fue cerca de las diez de la noche. Terminó la conversación con el Presidente con la certeza de que encabezará la lista de diputados nacionales por la Ciudad de Buenos Aires, pero prefiere esperar a la medianoche del sábado para confirmar su postulación. No sólo por la definición final a cargo de Cristina Kirchner, sino también por los propios cruces internos del Partido Justicialista porteño.
Según le comentaron a PERFIL fuentes del sector, el referente de raíces radicales “es el candidato que aceptan todos, la mejor expresión de lo que significa el Frente de Todos”. Con su estilo enérgico, pero moderado en los conceptos, Santoro le cae bien tanto a Alberto Fernández como a Cristina Kirchner, lo que claramente le facilitaría estar al frente de la boleta del oficialismo. “Le puede hablar a una sociedad que está muy caliente”, admiten sobre la figura del legislador quien fue ganando protagonismo mediático.
La conformación de la boleta definitiva del Frente de Todos en la Ciudad de Buenos Aires, que enfrentará a Juntos por el Cambio con María Eugenia Vidal como figura fuerte, se terminará de definir hoy pero ya hay otro nombre que nadie descarta: el de Carlos Heller que debe renovar su banca en Diputados.
En esta oportunidad, el FDT pone en juego tres bancas que obtuvo en 2017 que pertenecen a Gabriela Cerrutti, quien ya avisó que no tiene intenciones de seguir en el Congreso, el titular de la Comisión de Presupuesto Carlos Heller, que sí está dispuesto a continuar su labor sobre todo después del protagonismo que tuvo en el último año y medio de trabajo parlamentario y Gisela Marziotta, que entró en 2020 en reemplazo del electo Daniel Filmus.
Precisamente, la figura de la periodista es una de la que más ruido está generando en la conformación de la boleta distrital. Es que con el respaldo del sindicalista y empresario de medios Víctor Santa María, Marziotta se anima a pedir incluso encabezar la lista, pero ya aclaran que no tiene chances.“santa María le golpea la puerta del despacho todos los días a Alberto para que encabece Marziotta”, comentaron de manera irónica desde el interior del peronismo porteño sobre las altas expectativas de Marziotta. “Puede llegar a quedar de dos”, dicen cerca de Fernández. En el armado del rompecabezas electoral también pisa fuerte la legisladora porteña María Rosa Muiños, vicepresidenta del PJ porteño detrás de Mariano Recalde, que representa al espacio más ligado al “albertismo”.
Las perspectivas en el oficialismo son moderadas respecto a la cantidad de diputados nacionales que podría incorporar en esta elección de medio término. Si se tiene en cuenta los resultados de 2019, el Frente de Todos obtuvo en Capital Federal el 32,2% de los votos para la nómina de diputados nacionales y logró cuatro bancas. Terminó veinte puntos abajo respecto a Juntos por el Cambio que logró un 52,26%.
Uno de los datos de relevancia del cierre de alianzas fue la incorporación del Frente Renovador a la estructura, ya que en 2019 había decidido competir por afuera con Matías Tombolini como candidato a jefe de Gobierno porteño. También habría lugar para reclamar un puesto en la boleta de las PASO.