Con tensión por los búnkers, buscan dar muestras de unidad
Con gestos de tensión, las PASO de mañana en la Ciudad y en la Provincia se encaminan a determinar los liderazgos de cara a las elecciones generales de noviembre con un ingrediente clave: habrá fotos conjuntas de las listas el domingo por la noche.
Es el deseo de Horacio Rodríguez Larreta pero también de Elisa Carrió, de Patricia Bullrich y de los referentes de la UCR, desde Martín Lousteau al presidente del partido, Alfredo Cornejo.
Sin embargo, tanto en la UCR bonaerense como en el PRO bonaerense las diferencias se hicieron sentir en toda la campaña, pero especialmente en el sprint final hacia las PASO. Al cierre de esta edición, no había consenso entre Facundo Manes y Diego Santilli sobre cuál sería el búnker conjunto.
Durante gran parte del día los equipos de ambos precandidatos, que encabezan las boletas de Juntos en la Provincia, evaluaron opciones pero no podían ponerse de acuerdo. Incluso corrió la versión de que Santilli terminaría en el Salón Vonharv y Manes en Hotel Grand Brizo, ambos de La Plata.
A última hora de la noche de ayer seguían las negociaciones para evitar que haya dos lugares de espera de resultados y que puedan estar juntos en la previa los dos precandidatos.
De todos modos, la foto conjunta de ambos es una promesa que los equipos de campaña se juraron hace días. Salga como salga el resultado, habría unidad. En el larretismo hubo inquietud en la semana por una presunta reacción del neurocientífico si le toca perder la interna. Mientras que del lado de Manes no hubo rosas: terminó su última entrevista antes de la veda a las 7.30 de la mañana del viernes siendo reporteado por Nancy Pazos, la ex mujer del Colorado y madre de sus tres hijos.
En la Ciudad el panorama no es tan tenso pero tiene su complejidad. El jueves a última hora, el jefe de la campaña larretista, Fernando Straface, logró la firma de todos los partidos que componen Juntos por el Cambio en la Ciudad para modificar el reglamento interno de reparto de los lugares en las listas.
Es que una curiosa aritmética que conjugaba el sistema D’hont, con el cual se decide, en base a porcentajes, cómo se intercalan los nombres con los resultados de la primaria, junto a la Ley de Paridad de Género, dejaba abierta la chance de que Ricardo López Murphy quedara afuera de la elección general.
Pero no fue todo ganancia para Straface: a pesar de haber invitado al Bulldog y su lista al búnker de JXC en la Ciudad, el ex ministro de Defensa decidió que no esperará los resultados con María Eugenia Vidal y su boleta sino que lo hará en sus oficinas en la calle Suipacha con sus precandidatos porteños (ver página 8).
El gesto de modificar el reglamento supuso también tensión: fue un trabajo de orfebrería política que obligó a firmar a todos los partidos que integran JXC en la Ciudad.
En ese contexto, Vidal ya adelantó que quiere una foto con López Murphy y Adolfo Rubinstein, el radical que compite en una con un sector minoritario de la UCR. La ex vicejefa porteña cree que es clave que el Bulldog haga campaña con ella si le toca salir segundo. Será un aporte clave si es que Javier Milei logra hacer una buena elección.