EL CINE EN LA CIUDAD
Entre 2004 y 2007 Fernando Martín Peña ocupó el cargo de director del Bafici. En esa época se empezó a sentir el impacto de los recortes presupuestarios que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires fue implementando gradualmente hasta llegar a la situación actual, la de un festival ostensiblemente devaluado, si se lo compara con el de las primeras ediciones, las que el propio Peña señala como las mejores. “A mí me parece que el director del Bafici tiene que ser consciente de que se trata de un cargo político que exige negociar con las autoridades para tener el presupuesto necesario. Un festival organizado por el Estado tiene que lograr la mayor masividad posible con la menor cantidad de dinero posible. Pero hay un límite: no se puede hacer un buen festival con menos dinero del que requiere, y eso lo tiene que pelear el director del evento. El macrismo, con sus políticas neoliberales, fue destruyendo de a poco los cimientos del festival. La verdad es que en los últimos años tanto el Bafici como el Festival de Mar del Plata han ido barranca abajo. En Mar del Plata mejoraron mucho las cosas con la renovación que produjeron Miguel Pereira y José Martínez Suárez, pero por falta de presupuesto también se está yendo a pique”.