“AQUI TODO EL MUNDO BESA, EN SEVILLA APENAS TE DAN LA MANO”

Tiene 22 años y ya lleva tres discos editados. El último, Apices, es el que terminó de catapultar a Francisco Javier Alvarez -conocido como Bereta la fama. ¿Pero quién es él? El joven nació en Sevilla, España, y es el menor de cuatro hermanos. A sus 12, como hobby, comenzó a componer y a mostrarle sus canciones a sus amigos del colegio. Fueron ellos quienes hace cuatro años publicaron sus temas en YouTube y lo hicieron famoso. Allí su talento no pasó inadvertido y sus videos sumaron fans. Y terminó de explotar este año, cuando hizo una colaboración de Vuelve, una de sus canciones, junto al colombiano Sebastián Yatra. Hoy tiene allí dos millones de seguidores con videos de hasta 134 millones de vistas. Los temas preferidos: Lo siento y Te echo de menos. Si bien Beret dice que no le gusta encasillarse en un género musical, el reggae, el rap y el dancehall podrían definirlo como artista. “Fue una locura lo que pasó. Me siento un hombre de 40 por todo lo que hice en este tiempo. Mi vida cambió en absoluto”, dice el sevillano a Pronto, en el marco de la gira internacional con la que se presentó en el teatro Grax Rex, donde agotó localidades. -¿Hay otro músico en tu familia?

-No, ninguno. Vengo de una familia humilde y mis padres trabajaron de miles de cosas para que nunca nos faltara nada. Ahora cuidan a ancianos. Somos cuatro hermanos.

-¿A qué se dedican tus hermanos? -Una hermana es policía, la otra estudia Geología y mi hermano no está trabajando ahora mismo. Yo soy el más pequeño (piensa). Pero no por eso el más mimado, eh.

-¿Cómo recordás tu infancia?

-Muy bien, fue linda. Si bien siempre estuve fuera de casa porque estaba 13 horas adentro del colegio, supe disfrutarla. El tiempo que tenía de viaje de mi casa

Se hizo conocido cuando sus hermanos empezaron a subir sus videos a YouTube. Fue el inicio de una carrera como cantante que siempre soñó. Una canción que hizo con el colombiano Sebastián Yatra lo catapultó a la fama y hace poco conquistó Buenos Aires llenando el teatro Gran Rex

hasta el instituto lo usaba para componer, que es lo que más me gusta.

-¿En qué momento resolviste dedicarte a la música?

-Entré al bachillerato pensando en seguir luego la carrera de Sonido. Y a los 16 años me di cuenta de que no era lo que yo quería y se lo planteé a mis papás: “Llevo toda mi vida haciendo lo que debo, quiero hacer lo que quiero”. Lo mío era cantar. Seguí componiendo y comencé a subir mis videos a YouTube, así empezó todo.

-¿Tu familia te apoyó?

-Siempre. Al principio ellos se pensaban que era un hobby, decían: “El niño está cantando como cualquier chaval de Sevilla”. Recién lo tomaron en serio cuando me vieron arriba del escenario y ganando dinero. Ahora ellos están más emocionados que yo. El primer show lo di en Málaga y estaba lleno de gente, nunca tuve tantos nervios como ese día. Pero mi familia siempre confió en mí. -¿Te seguís poniendo nervioso antes de los shows?

-No tanto. Antes me ponía mal porque sabía que tenía que interactuar con las fans y no sabía ni qué decir. Además, la primera gira que hice fue grande y sin hacer conciertos pequeños antes. Empecé con setecientas personas mirándome en un show en Málaga. Con el correr de los años fui aprendiendo y hoy me siento mucho muy seguro de mí mismo. Me quité muchas presiones de encima.

-¿Te imaginabas esta repercusión? -¡Ni loco! Hoy veo que la gente en mis conciertos llora, se ríe, salta; y no lo puedo creer. Me pone muy feliz.

-Hace poco hiciste una colaboración con Sebastián Yatra.

-Sí. Sebastián me contactó y me ofreció trabajar juntos. Me sorprendió muchísimo porque me propuso cantar Vuelve, que no era un tema nuevo, ya tenía dos años. Al principio tuve muchas dudas y no sabía si era momento para relanzarla, pero en cuanto escuché el resultado final supe que iba a gustar. Por suerte así fue. Sebastián es un artista increíble y estuvo bueno trabajar con él.

-Hablemos de tu visita a nuestro país. ¿Qué te pareció la Argentina?

-¡Me encanta! Salí de joda con unos amigos argentinos que me llevaron a recorrer varios boliches. También me la pasé comiendo las cosas riquísimas que tienen ustedes.

-¿Qué probaste?

-Probé el asado, el fernet, el dulce de leche y los alfajores. Me la pasé comiendo milanesas: una o dos por día, fue mi dieta acá. En España venden algo muy parecido, se llama filete empanado, pero la carne de Argentina no se compara. ¡Tienen la milanesa más rica del mundo! -¿Y qué te pareció tu público de acá? -¡Son muy eufóricos y cariñosos! En Sevilla nadie te da un beso así porque apenas te dan la mano. Y apenas llegué a Buenos Aires, una fan me dio un beso en la cara. Me gusta porque a la gente no le importa el ‘qué dirán’ y si quieren llorar delante tuyo y darte un abrazo, lo hacen. -¿Qué hacés en tus tiempos libres? -Toco la guitarra y ahora estoy aprendiendo a tocar el piano. No salgo a bailar y te cuento por qué: en tu país se me escucha, pero en España mucho más y mis seguidores tienen mi edad. Entonces no me gusta que me reconozcan en plena fiesta. Prefiero hacer reuniones más tranquilas y con amigos.

-¿Estás de novio?

-No. He dedicado un par de canciones románticas que compuse, no te voy a mentir, pero estoy soltero (ríe).