BASTA DE TODO

Necesitaba, más que nunca, un tiempo de paz para reflexionar. Matías Martin (48) se hizo una escapada a Punta del Este con su mujer, la modelo Natalia Graciano (42) y sus hijos Mía (12) y Alejo (10) para descansar y pasar las fiestas de fin de año. Los últimos meses de 2018 fueron difíciles para el conductor de Basta de todo, la salida de Eduardo Massa Alcántara, conocido por todos como Cabito y uno de los panelístas emblemáticos del ciclo, generó ruido, rispideces y cruces verbales a través de los medios. Cabito estuvo 13 años junto Matías en Basta de todo. Pero en los últimos tiempos, el conductor expresó que le “aportaba muy poco al programa” y que luego de pensarlo durante muchos meses decidió que lo mejor era que el humorista no siguiera en el ci- clo. Por sus graves problemas de sobrepeso, Cabito se hizo una operación de bypass gástrico en 2017, adelgazó 115 kilos luego de llegar a pesar más de 200. Estuvo seis meses fuera del programa, pero cuando volvió ya nada fue igual. “Me hicieron cargo de una situación de la que no soy responsable. Estoy triste y mal”, dijo Cabito quien además apuntó que no era el culpable de que a Basta no le fuera tan bien como antes. “Si yo era tan importante, me hubieran pagado como tal”, se animó a contar en una entrevista. Para Matías fue una traición y se descargó también en los medios: “Lo que queda instalado es ‘lo echaron porque está enfermo’ o ‘lo abandonaron en su enfermedad’. Esa visión es injusta, me siento atacado y me obliga a defenderme. No es nueva su adicción (a la comida). Lo acompaña desde que lo conozco, desde hace 13 años, y siempre lo acompañé. Él es la víctima y nadie más que él”, se despachó Matías. Hoy la relación entre los dos está rota. Martin también está pensando en nuevos horizontes. Ya aseguró que el que viene puede ser el último de Basta de todo, un ciclo que lleva 18 años al aire. Lo tienta volver con todo a la televisión, con un éxito. El ejemplo de Andy Kusnetzoff con PH parece marcar el camino. De momento, el conductor volvió a sus raíces y está comentando partidos de la Superliga. En Punta, con su mujer y sus hijos, mientras disfruta, planea qué giro darle a su carrera.

Junto a Natalia Graciano y los hijos de ambos, Mía y Alejo, busca recomponerse luego de un fin de año que lo tuvo a maltraer. El conflicto público con Eduardo Massa Alcántara, Cabito, lo dejó estresado y quiere cambiar el chip ya