LA PRINCESITA KARINA YA NO ESTA TRISTE
Pasó un pésimo momento durante la fiesta de fin de año que compartió con su mamá, su hija y el elenco
de Siddharta, por el violento comportamiento de su hermano Ezequiel.
Pero después todo fue sonrisas: en Carlos Paz la acompaña su novio, el abogado Juan Pablo Rovito, con el que
sale desde mayo
Gritos, bullicio, flashes, pedidos de selfie de un lado y del otro de la valla, alboroto. Mucho alboroto. Las salidas de los artistas de Siddharta del Teatro Luxor de Villa Carlos Paz generan revuelo puesto que los turistas que veranean en las sierras quieren saludar a las estrellas y obtener en lo posible una foto para el recuerdo. Noche a noche, el tránsito de la avenida Libertad se ve entorpecido por la cantidad de personas que se agolpan entre la vereda y la calle en esos fugaces instantes en que salen de la función Flavio Mendoza, Facundo Mazzei, Mirta Wons, el Flaco Pailos y Karina “La Princesita” Tejeda (32), los protagonistas del espectáculo que el coreógrafo presenta esta temporada en la villa turística y que va primero en ventas a nivel nacional. Aunque sale bastante rápido del teatro, Karina no pierde la simpatía y mientras camina hacia su camioneta, saluda a sus fans. Por lo general, va custodiada por un seguridad para evitar algún tironeo brusco de la gente que, entre el fervor y la emoción por tenerla cerca, puede llegar a apretarle un poco de más las manos o no soltarla en el abrazo típico que conlleva una selfie. Días atrás, Tejeda no salió sola del Luxor sino que lo hizo acompañada por un apuesto muchacho que parecía ser mucho más que un amigo. Rubio, de ojos claros y buen porte, la miraba de lejos mientras ella cumplía con los pedidos de autógrafos y fotos con el público. Aunque no hubo demostraciones de afecto públicas, el hombre se sentó al volante de la camioneta de la cantante y una vez que ella subió al vehículo, partieron con rumbo desconocido. Cuando él notó entre el tumulto de gente la presencia de una cámara de fotos profesional, con un flash mucho más potente que el de los teléfonos celulares, reaccionó e intentó taparse la cara con las manos pero fue en vano: la foto ya había sido tomada. De esta manera, Pronto ratificó
lo que hace un tiempo se sospechaba y que ya era un secreto a voces: La Princesita no está sola. Aunque ella aun no se anima a ponerle el rótulo de novio, este semanario confirmó con su círculo íntimo que efectivamente está en pareja. ¿Hace cuánto? Exactamente seis meses, aunque ella intentó todo este tiempo mantenerlo en secreto. ¿Quién es él? Se llama Juan Pablo Rovito, tiene 30 años y es abogado. ¿Cómo se conocieron? Por amigos en común en mayo pasado en Buenos Aires y aunque el vínculo nació como una amistad, al tiempito sintieron un flechazo y se convirtió en un furtivo romance. Como en junio ella tenía previsto el debut de Siddharta en el Teatro Broadway y sabía que le esperaban intensos meses de trabajo por delante -con el musical en la cartelera porteña durante la segunda mitad del 2018 y el inminente desembarco veraniego en la temporada carlospacense-, se armó un hueco en su agenda y voló a Punta Cana junto con Rovito para disfrutar de unos días de descanso y pasión en las paradisíacas playas de República Dominicana. Una vez que regresó del Caribe, comenzó a correr el rumor de que estaría de novia y con los días llegó a la prensa el nombre de Rovito pero ella se encargó de negar rotundamente una y otra vez el incipiente noviazgo. Tampoco había material fotográfico que confirmara el romance de la cantante tropical con el apuesto abogado, con lo cual Karina tenía todas las de ganar en su negación de la relación. Eso fue así durante todos estos meses hasta que Pronto confirmó, el 28 de diciembre a la salida del Teatro Luxor, que la artista de música tropical de 32 años está felizmente de novia. Y un dato no menor: su hija Sol Celeste (11), fruto de su pasada relación con Ezequiel “El Polaco” Cwirkaluk (31), ya lo conoce a Rovito y según cuentan sus allegados, la niña aceptó de entrada al nuevo novio de mamá y el abogado cuenta con la bendición de la pequeña. La postal familiar que dejó la salida del teatro lo confirma: Rovito al volante, Karina en el asiento de acompañante de su imponente camioneta y Sol Celeste en el medio, en el asiento trasero. Tan enganchados están, que viajaron juntos por la ruta los 734 kilómetros que separan Buenos Aires de Carlos Paz -algo así como 7 horas y media de viaje- ya que Rovito se ofreció a llevar a su chica y a su hija hasta las sierras del Valle de Punilla y ayudarlas con la mudanza a la casa que las cobijará durante los tres meses de temporada teatral estival. El abogado se montó al hombro la mudanza, subió y bajó las valijas y se quedó unos días con ellas en Carlos Paz. Es
más, también conoció a la madre y a la hermana menor de la cantante, quienes viajaron a Córdoba para pasar Año Nuevo con la estrella de la familia. Rovito no formó parte de los festejos del 31 de diciembre ya que regresó a Buenos Aires para despedir el 2018 y recibir el 2019 con su familia. Aunque nunca se casó ni tiene hijos, cuentan que es un muchacho muy afectuoso y arraigado a su gente y que regresó a Capital porque ya tenía previsto pasar las fiestas con su familia. Sin embargo, el contacto con Tejeda es minuto a minuto, viven hablando por teléfono y aunque ella se va a quedar hasta marzo en las sierras, él tiene previsto viajar seguido a visitarla. Enamorada, la cantante volvió a apostar al amor tras haberse separado de Sergio “Kun” Agüero (30) en agosto de 2017 luego de cinco intensos años de relación a distancia. Aunque le costó cortar el vínculo con el futbolista del Manchester City, en febrero de 2018 la cantante habló por primera vez de la ruptura y confirmó, en la mesa de Mirtha Legrand, que ya no estaba con él: “La verdad es que no nos reconciliamos. En su momento dije que hablábamos, pero eso no es que volvimos”, sostuvo tajante y sin dar mayores detalles. Días atrás, en nota con Intrusos confesó: “Lamentablemente hoy arrastro que Sergio crea que me la pasé hablando de él y la prensa se la debo a él desde que nos separamos y eso no es así. Nunca conté nada, nadie sabe por qué nos separamos, qué pasó, qué no pasó. Los problemas íntimos van a morir conmigo pero separando lo de la pareja sí debo reconocer que él a mí me ayudó para bien y no para su propio beneficio o por haber sido celoso. Sergio pagó de su bolsillo abogados y escribanos que me ayudaron a acomodarme. Yo laburé en negro una década y él me ayudó”. Y remarcó que Sergio, el papá del jugador, no manejó su carrera ni la controló por órdenes de su hijo. Durante los cinco años que estuvo de novia con el Kun, casi no dio notas y mantuvo su vida íntima bien resguardada. “Tuve respeto por la exposición de él, que es mucho más conocido. No quise exponerlo, sentía que contar ciertas cosas nuestras era dejarlo en ridículo y tampoco subía fotos porque no me gusta ostentar. Tampoco quiero dar a entender que hablamos porque no es real y no quiero traerle problemas. Voy a ser clara, cuando yo dije que no hablaba para evitar ciertos problemas con el entorno, no me refería a la familia; me refería a que no quería generar problemas con Gianinna Maradona. Sí hay algo que a mí me pesa y que lo voy a seguir diciendo siempre porque todavía no me saqué la bronca es que ni siquiera me defendí bien cuando me acusaron de haber estado con Diego (Maradona) y a mí eso me dolió. Porque hay portales de Inglaterra en los que subían notas y ponían ‘primero estuvo con él y después con el ex yer- no´. Es re fuerte quedar de esa manera porque si hubiese sido así me hago cargo pero no fue así entonces ¿por qué me tengo que comer ese garrón?”. Yo sé de dónde vino esa versión, yo sé quién mandó un mensaje a los medios poniendo ‘la put...’. Eso sí me dio bronca, más que cualquier otra cosa. Hasta ahora lo cuento y se me acelera el corazón de la rabia”, cerró pero no precisó la identidad de la persona en cuestión. Una vez que se separó de Agüero, Karina disfrutó de la soltería y cuando menos lo esperaba, el destino le volvió a poner en el camino un hombre que la hipnotizó. Cuentan sus allegados que la mujer está muy enganchada pero cuando alguien le pregunta por Rovito, aun no se atreve a ponerle el título de novio. Cuando surgió el rumor, en mayo del año pasado en Infama, Tejeda fue tajante: “No estoy de novia, eso es mentira. Sí te puedo decir que con Juan Pablo tenemos amigos en común”. Y cuando Pía Shaw la bromeó e hizo una comparación de Rovito con El Polaco porque los dos son rubios y de ojos claros, Karina los diferenció: “Para mí no se parecen en nada”. En agosto de 2018 volvieron a sonar con fuerza los rumores de romance y a la salida del teatro Broadway, la artista de Siddharta volvió a negar el noviazgo. “Te soy totalmente sincera: es mentira. No estuve ni estoy de novia con Juan Pablo. Es un amigo y nada, nada más”, expresó frente a las cámaras que la aguardaban en la
puerta. En noviembre volvió a aclarar en nota en Pamela a la tarde: “¡Juan Pablo es un amigo, nada más!”. ¿Si Rovito tiene chances de ser mi pareja? Mmm… Nadie tiene chances porque yo no quiero. Aunque es cierto que el amor no pide permiso, mientras lo pueda evitar, lo voy a evitar. La verdad es que no tengo más ganas, por lo menos este año. Por eso también fue esta decisión de llenarme de actividades, para no tener tiempo ni para pensar, ni para salir ni nada. Estoy negada, no quiero saber de nada. Lo que sí tengo son amigos”. Claramente, la Princesita no tenía ganas de blanquear ninguna relación aunque ya era un secreto a voces su romance con el abogado y todos sus compañeros de elenco lo veían noche a noche en el teatro, aunque él siempre se ponía a un costado y evitaba llamar la atención. “Es un chico re perfil bajo y mientras pueda, va a tratar de pasar inadvertido”, confió a Pronto un íntimo amigo de la autora de Corazón mentiroso. Y cuando Jorge Rial, en medio de un móvil para Intrusos, la puso en aprietos para que blanqueara el romance con Rovito, la cantante lo eludió aunque dejó la puerta entreabierta. “Es un amigo. Y no se nos vio bastante acaramelados en ningún lado porque la realidad es que somos amigos. Somos un grupo grande de amigos y compartimos salidas. Hemos ido a cumpleaños... Igual, no tengo que dar explicaciones de quién es o qué es. Juan Pablo es como un amigo dentro de otros amigos más que también tengo. Somos muy buenos amigos, pero por ahora no más que eso. Por el momento estoy sola y no estoy buscando nada más que eso”. ¿Podés prometer que en un mes no te vamos a ver de la mano y a los besos con Rovito en la portada de una revista?”, inquirió el conductor de Intrusos y con astucia, la Princesita respondió: “No, dentro de un mes estoy segura que no. En más tiempo, no sé…”. Esa charla fue a fines de agosto y aunque no descartó formar pareja con él en un futuro cercano, sí fue contundente a la hora de hablar del Kun: “No sentí nada al ver las fotos suyas con otra mujer. Yo estoy en la mía. No siento nada, no me interesa. No me importa nada de lo que él haga”. Hoy, el corazón de la mujer late fuerte por el abogado, quien se convirtió en su mayor confidente y en el dueño de sus pensamientos. Pasaron juntos en Carlos Paz los últimos días de diciembre y él se volvió a Buenos Aires para recibir el Año Nuevo con su familia. Por eso no estuvo presente la tremenda noche del 31, en que Karina denunció por violencia de género a su hermano Ezequiel. Invitados por Flavio Mendo- za para celebrar el cambio de año, los artistas de Siddharta brindaron en el country donde se aloja el coreógrafo y Karina fue con su mamá, su hermana, su hija Sol y su hermano Ezequiel. La cantante sorprendió a sus miles de seguidores al publicar un video en el que se ve a su hermano fuera de sí, desencajado, gritando y haciendo ademanes violentos. Aunque lo borró rápidamente, se ve a la madre de La Princesita intentando atajar al muchacho y se escucha la voz de Karina diciendo: “Mamá dejalo, que todos vean que esto es violencia de género”. Luego se supo que el hombre había tenido una contestación fuera de lugar con un bailarín de la compañía, que Karina le habría llamado la atención y que Ezequiel, un tanto pasado de alcohol por los festejos, habría reaccionado de la peor manera. Fue entonces que, en la madrugada del 1º de enero y ya en la casa de la cantante, el muchacho se sacó y Karina tuvo que llamar a emergencias. Alertado por la situación Flavio le mandó a su custodio personal, llamado Nico, y el hombre se encargó de llevar a un hotel a Ezequiel Tejeda para que terminara de pasar esa noche y al día siguiente se subió a un avión que pagó la cantante y regresó a Buenos Aires. “Subí el video por mie- do. Había llamado a la policía pero no encontré soluciones, entonces le dije basta porque iba a subir el video y lo subí. Todo comenzó en la ruta cuando volvíamos de celebrar Año Nuevo en la casa de Flavio en Carlos Paz. Llamé al 144 desde la ruta pero me dijeron que debía llamar a otro número porque estaba en Córdoba”, detalló Karina en diálogo con Intrusos. Y ahondó: “Somos todos muy nerviositos y discutimos como cualquier familia. Pero cuando se excede y le decís ‘manejá tu vocabulario, hay criaturas, a mamá no le hables así’, no se puede seguir naturalizando eso”. Mi hermano también es víctima y necesita ayuda. El es así, como mi papá, que era sí. Es muy difícil separar el amor que uno siente por un ser querido, pero es un ejemplo. Pretendo ayudarlo, no me quiero sentar acá a destrozar a mi hermano porque es mi hermano. Si me pongo a pensar desde el cariño que le tengo, me desarmo porque lo amo. Fue una manera de ayudarnos a todos, de que él tome consciencia porque pasa siempre esto. Lo subí y después lo borré, pero ya lo habían visto todos. Igual, está bueno, porque si no, lo negaba como hago siempre. Venía filmando para decirle que lo que estaba haciendo era violencia de género. Le dije ‘calma-
te o lo subo’, pero no era la idea. Quería que bajara un cambio. Lo estaba grabando como excusa, para ver si frenaba”. Dolida por ver a su hermano desencajado, contó que se crió en un ambiente con violencia ejercida por su padre y dijo que su hermano se comporta igual que se progenitor. Aunque lo solucionó en el corto plazo, no le gustó que su hija Sol Celeste haya presenciado un episodio de violencia semejante y por su hija juró no volver a permitir una situación así. Aunque comenzó el año un tanto alterada, Karina tiene un gran verano por delante: es la protagonista de la historia de amor de Siddharta junto a Facundo Mazzei en el espectáculo que promete ser el de mayor recaudación no solo de la plaza cordobesa sino también a nivel nacional. Bien en el trabajo y mucho mejor en el amor, La Princesita encontró al hombre que le roba los suspiros y aunque todavía no quiera llamarlo novio, se sabe que es el muchacho que la acompaña desde mitad de año. “Está muy enamorada y apostando a todo por esta relación”, confirmaron desde su círculo íntimo. Lo bien que hace.