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“ESTOY SOLA Y NO ME ESCRIBE NI EL LORO”

Barby dice que no tiene candidatos y no comprende cómo hacen otras mamás solteras o separadas: “Me pregunto cómo hacen las que tienen hijos para enganchar pareja tan rápido: Cinthia Fernández, Nicole Neumann, Pampita. Todas de novias con hijos y yo soy la

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-No lo sé. El se muestra con novias todo el tiempo así que no tendría motivos para celarme ni mucho menos. Francisco todo el tiempo se muestra con distintas novias; se ve que necesita hacer eso. No sé qué decirte.

-¿Elena ve a su medio hermano, Ian? -No, no lo ve y eso me tiene mal porque lo ama y quiere verlo todo el tiempo. Por eso, le inicié una demanda a Gisela Bernal, la mamá de Ian, por régimen de visitas de hermanos. Pero no obtuve respuesta, no fueron a la audiencia, no le dieron mucha pelota. Hasta que no pase la feria judicial y yo vuelva a Buenos Aires, va a estar todo igual. No me gusta que no vea al hermano porque no esté el padre; tendría que poder verlo igual.

-¿Tu nena te pide verlo?

-Todo el tiempo. Hasta cuando dibuja hace garabatos y te dice: “Acá estás vos, mamá, papá, Ian y yo”. Para ella, nosotros cuatro somos su familia. En el jardín la maestra me contaba que le hablaba mucho de su hermano. Calculo que el nene también debe extrañarla.

-¿Cuál es el impediment­o para que se vean?

-La mamá de Ian no genera el encuentro. Yo quiero pero del otro lado no hay respuesta. Tampoco la llamo y nunca lo haré porque ella me inició un juicio a mí. Por todo lo que pasó en su momento con ella, con Francisco y el nene, opiné como opinó todo el mundo y me comí un juicio por eso. Tuvimos dos audiencias y me dio la sensación de que a Gisela le encantan esas situacione­s: se produce, se pone divina y va a Tribunales. Le gusta eso, lo disfruta. Igual estoy súper tranquila. Me pide una barbaridad de plata y no la tengo, en el caso de que ella gane.

-¿No es Francisco quien debería generar el encuentro entre sus hijos?

-Sí, totalmente pero está desapareci­do en México. Tendría que hablar con la madre de Ian y ver de qué forma podríamos generar el encuentro de los nenes. Estoy abierta a llevarla a la casa de Gisela o que lo traigan a la mía. Y si ella pone algún pero, me adapto porque solo quiero la felicidad de mi hija. A veces, la gente grande es más inmadura que los niños. Y los que sufren son los nenes.

-¿Cómo estás de amores?

-Muy soltera. Hace cinco años que estoy soltera pero me cansé estar así y quiero que aparezca alguien ya. Si bien llevo cinco años sin estar de novia oficialmen­te con nadie, todos saben que tuve algo por ahí.

-¿Con el Polaco?

-Claro, sí. ¿Por qué no prosperó la cosa entre nosotros? Te voy a ser sincera: en su momento con Ezequiel casi nos pusimos de novios pero él se vino a Carlos Paz a hacer temporada y conoció a Silvina Luna. Ahí quedó todo en stand by. Igualmente, nunca dejamos de vernos y cada vez que él se peleaba, me llamaba a mí. -¿Qué te pasa con él?

-Nos queremos mucho, qué se yo. Lo quiero, él me quiere a mí, somos como familia. No podría explicar con palabras nuestro vínculo. El hace poco se separó y se abocó a su carrera, yo estoy acá en Carlos Paz trabajando este verano...

-¿Le darías una oportunida­d si te viene a buscar?

-Ay, no sé. No creo que me venga a buscar. El está muy soltero, es verano y es bastante mujeriego. Igual es raro lo que me pasa porque jamás podría estar con un hombre mujeriego; sin embargo, a él le perdono todo y lo banco. No sé cómo explicarlo, me puede. Igual ojo: si nos llegásemos a poner de novios y descubro que me es infiel, no lo banco más.

-¿Es una historia sin final?

-Sí. Nos queremos mucho, sentimos mucha atracción. El sexo y la piel que tenemos es súper importante pero no lo es todo: nos morimos de risa cada vez que nos vemos y realmente nos llevamos muy bien. Nos divertimos mucho, más allá del sexo. Somos muy parecidos en la personalid­ad y nos conocimos en un momento re clave para los dos. Por eso generamos un vínculo muy fuerte.

-¿Momento clave por qué?

-En mi caso, mi hija tenía 5 meses, me estaba separando de Francisco y estaba entrando al Bailando por primera vez. Se me abrió un mundo diferente, fue todo positivo y estoy eternament­e agradecida a la producción de ShowMatch porque a partir de ahí no paré de laburar. El también estaba en un momento de su vida complicado y si bien hacía sus shows, entrar al Bailando le abrió un camino enorme y lo hizo más popular de lo que ya era. La gente lo adora y cada vez que voy por la calle, el público me dice: “Qué linda pareja que hacían con el Polaco, decile que lo amamos, mandale saludos”. No hay persona que no me hable de él.

-¿Si te cruzás con Silvina Luna, la saludás?

-Ay, no, ¡por favor! ¡No nos queremos nada! El año pasado habló pestes de mí, fue muy mala por celos. Dijo cualquier cosa y no me conoce. Actuó así por celos y con maldad. Siempre le molestó la relación tan fuerte que tenía y tengo con El Polaco.

-Es entendible: era la novia y sabía que él siempre te volvía a buscar.

-Puede ser, qué se yo. No es tema mío. Puede ser normal que sienta celos pero tampoco al extremo de la maldad. Todas las mujeres somos celosas pero no me gustaron sus formas. Es más, Silvina le

agarraba el celular al Pola y me escribía haciéndose pasar por él.

-¿En serio?

-Una vez, me empezó a hablar alguien de un número diciéndome que era El Polaco. Y yo dudé un poco al principio pero le seguí el juego. “Qué raro”, pensé. Y cuando me empezó a hablar, en la charla me di cuenta al toque de que no era él porque usaba palabras que él nunca usa. Le seguí el juego y después descubrí que había sido ella. “Le mandaste fotos al Polaco”, me acusó en la tele. ¿Y ella cómo lo sabía? Se pisó solita.

-Estás sola. ¿Te llueven candidatos? -¿Sabés que no? No me escribe ni el loro. Será que no salgo demasiado, no sé qué pasa. Me pregunto cómo hacen las que tienen hijos para enganchar pareja tan rápido: Cinthia Fernández, Nicole Neumann, Pampita. Todas de novias con hijos y yo soy la única que no puedo. ¡No sé dónde conocen a la gente!

-¿Sos muy exquisita?

-Un poco. Tiendo a buscarle el pelo al huevo y a comparar a las personas con mis relaciones anteriores. Voy a tener que bajar las pretension­es, sino me voy a quedar sola. Encima Elenita me está pidiendo un hermanito. “A mamá todavía le falta un novio antes”, le explico.

-¿Y ella qué te dice?

-Nombra al Polaco. “Ay, mami, el Polaco puede ser tu novio”, me dice. Como lo conoce, lo ama. El lo sabe porque le mandé un videíto de la nena pidiendo que sea mi novio y él se mata de la risa.

-¿Lo ves como el papá de tu próximo hijo?

-Me mataste. ¡No lo sé! El Polaco es muy buen padre, es un genio con sus hijas y esa parte de él me encanta. Tiene feeling con los chicos, es su súper papá.

-Subís fotos hot a las redes, ¿te hacés cargo de los ratones que generás?

-Un poco sí y un poco no. Las subo porque me gustan las fotos y después es un quilombo lo que se genera, mucho revuelo. Me gusta cuando me escriben mujeres y me piden el secreto para estar bien. Hay que comer sano y entrenar. Me cuido bastante, sobre todo ahora en temporada: voy al gimnasio, bailo y estoy en movimiento. La comida es fundamenta­l. -¿Qué lugar ocupa el sexo en tu vida? -Estoy complicada en ese punto porque no me va el sexo casual. Nunca tuve sexo en la primera cita; necesito crear un vínculo con la persona antes de intimar. Me cuesta el touch and go, soy un poco antigua y eso debe ahuyentar a los hombres.

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