Un pelotón detrás de Amazon
Bingo Box y Alibaba son nombres desconocidos para los comercios minoristas de Occidente. Pero es probable que en pocos meses pasen a primera plana como parte de la avanzada por automatizar completamente las operaciones de comercio minorista al público. Por el momento, Amazon es el jugador excluyente en este segmento, tras haber inaugurado en Seattle (Estados Unidos) su tienda experimental Amazon Go, donde los compradores pueden pagar sin pasar por la caja. Bingo Box es una cadena china con más de 100 sucursales, sin personal de cajas: sus clientes escanean un código en sus teléfonos para entrar y, una vez adentro, escanean los productos. El tercer paso es pagar a través del celular: ahí se abre la puerta de salida.
Alibaba es una de las empresas de Internet más grandes de China, acaba de aplicar nuevas tecnologías en 35 de sus tiendas Hema, con cajas automatizadas: los clientes escanean los productos, y pagan a través de un sistema de reconocimiento facial. No hay carga en el carrito: de eso se encargan bandas transportadoras ubicadas sobre sus cabezas, que van cargando bolsas de compra, que son retiradas al final de la línea (como ocurre en tantas farmacias o corralones de la Argentina). Así como Amazon terminó liderando las ventas online en Estados Unidos, sus competidores no virtuales ya están abriendo el paraguas ante la irrupción del Amazon
Go: Walmart, la cadena más grande de ese país (y del mundo) está experimentando con robots repositores denominados Bossa Nova: por ahora, estos involuntarios seguidores de Vinicius sólo cumplen tareas auxiliares, ya que reportan los faltantes y los encargados de corregirlo son supervisores de carne y hueso. Pero el empleo corre serios riesgos en el negocio minorista: un análisis del Foro Económico Internacional de 2017 arrojó que entre 30 y 50% de los empleos minoristas, a escala mundial, están en riesgo.