Guía para elegir en la renovación de la PC
El cambio de la compu de escritorio exige cierta planificación, ya que sus costos son significativos.
Como las computadoras no se cambian anualmente y su precio es significativo, lo principal es definir para qué se usará y, luego, intentar adquirir la última tecnología disponible, adecuada para esa funcionalidad. Esto sirve para cualquier equipo: notebooks, PC de escritorio, ultrabooks, 2 en 1 o convertibles.
Con respecto a cada componente, sus particularidades son las siguientes.
Procesador. Los últimos procesadores de Intel son los Core i5 e i7, aunque ya liberó los i9. También hay que fijarse en la generación: la última es la novena.
Por su parte, AMD tiene los Ryzen 5 y
7 que van por la segunda generación, aunque ya está por lanzarse la tercera. La nomenclatura de un procesador muestra sus propiedades. Por ejemplo, Core i7-6700K: Core es la arquitectura, i7 es la familia, 6 (el primer número tras el guión) indica que es de sexta generación, 700 indica que es de alto rendimiento y K, que no tiene la velocidad bloqueada. También hay que considerar la frecuencia y la cantidad de núcleos, entre otros puntos. Siempre, cuando más alto sea el número, mayor rendimiento. Además, todos los Core i7 de séptima y de octava generación tienen la tecnología HyperThreading: cada núcleo “divide” su trabajo en dos “threas” (hilos) para agilizar el procesamiento. AMD ofrece algo similar en sus Ryzen, que se llama SMT (Simultaneous Multi-Threading).
Memoria RAM. Lo mínimo recomendable es 8 GB, pero si el equipo se usará para editar video o trabajar en 3D es deseable tener 12 o 16 GB. La usada actualmente es la DDR SDRAM, que va por la versión 4. Por lo tanto, es aconsejable verificar que la memoria RAM es DDR4. Para 2020, se esperan módulos DDR5.
Almacenamiento. Hasta hace poco se limitaba a discos rígidos (HDD) pero ahora suele sumarse una segunda unidad, representada por un disco de estado sólido (SSD), que no tiene partes móviles. Esto minimiza fallas mecánicas y los hace más resistentes y más rápidos, aunque son de menor capacidad debido a su costo. Una buena alternativa es tener un HDD de 1 TB y un SSD de 256 GB o 512 GB. Hay equipos que sólo incluyen un SSD: entonces, es buena idea sumar un disco duro externo.
Pantalla. La resolución debería ser Full HD, es decir, 1920 x 1080 puntos. Pero si el equipo se usará para trabajos multimedia, es posible que sea necesaria una resolución 4K UHD (3840 x 2160 puntos). En cuanto a la tecnología, lo aconsejable es IPS (In Plane Switching), ya que permite ver bien desde todo ángulo. Y si se puede, hay una alternativa mejor: PLS (Plane to Line Switching).
Conectividad. Es preciso que tenga WiFi compatible con la norma 802.11ac y Bluetooth 4.2. Y un puerto RJ-45, una ranura para tarjetas SD y los jacks para micrófono y auriculares. También es importante que tenga una salida HDMI compatible con la norma 1.4 (permite enviar imágenes a un TV, monitor o proyector con calidad de 2160p a 30 FPS), dos o tres puertos USB 3.1 Gen 1 (velocidad máxima de transferencia de 5 Gbps) o Gen 2 (duplica teóricamente la velocidad de la Gen 1) y un puerto USB
C.• de tipo
Alicia Giorgetti