Fábrica de quesos La Majadita
Empezamos a producir quesos en el 2007 con el aporte de 8 familias de la zona. Eran unos 180 litros. Hoy son 30 los tambos que entregan la producción en planta o se las retira un camión refrigerado”, cuenta Lidia Juárez, una docente jubilada de Córdoba que regresó a su pueblo natal, San Pedro, para fundar La Majadita, una fábrica de quesos de cabra. “No tenía necesidades económicas. Mi calidad de vida hubiera sido mejor si me quedaba en casa. Pero quise agregar valor a los tambos caprinos y visibilizar sus esfuerzos”, agrega Juárez.
San Pedro está ubicado en la comuna de Gutemberg, departamento de Río Seco, 230 kilómetros al norte de Córdoba capital. Juárez cuenta que se jubiló de maestra en la escuela municipal Juan Antonio Paredes, en Córdoba capital, y de inmediato puso proa a San Pedro. Se inició en la actividad quesera sin saber nada del rubro, pero con el apoyo de toda su familia. “Me tiré a la pileta y después vi si tenía agua. No me jacto de eso, porque me equivoqué mucho. Si uno investiga, se forma y se asesora, se pierde menos”.
En el 2014 Juárez impulsó la formación de la Asociación de Productores de la Cuenca Láctea Caprina “La Majadita”, a través de la cual los asociados expresaron sus necesidades y dificultades. La entidad logró gestionar y obtener fondos para capacitación, equipamiento e infraesturctura. Con el tiempo el establecimiento fue pionero en la producción de energías no tradicionales. “Cinco productores disponen de biodigestores, que producen gas a partir del guano de cabras y con ello obtienen la energía para alimentar el freezer. Son productores que no tienen luz eléctrica y mantener la cadena de frío es condición indispensable para ser proveedor”, dice Juárez
En la actualidad La Majadita no sólo coloca sus productos en Córdoba, sino también en Buenos Aires, La Pampa, Rosario, San
Luis y Mendoza. La extensión de la cuarentena sorprendió a Juárez con un gran stock productivo y con la necesidad de conseguir nuevos compradores que compensaran la caída de ventas de Semana Santa, uno de los puntos fuertes de ventas en el año.
La Majadita, hoy, es una planta modelo, que ha contado con el asesoramiento de la Facultad de Agronomía de la Universidad Nacional de Córdoba, el asesoramiento de INTA Manfredi y del control de calidad de INTI Lácteos de Rafaela y Cruz del
Eje. Además, cuenta con certificaciones del Registro Nacional de Establecimientos (RNE), del Registro Nacional de Productos Alimenticios (RNPA) y de productos libre de gluten
(TACC).
“Me tiré a la pileta y después vi si tenía agua. Si uno investiga y se asesora, se pierde menos”.