Un ecosistema inestable
Las conclusiones del estudio que ilustran esta la nota fueron el resultado de abordaje “por etapas” de preguntas por parte de Prodem a un conjunto de líderes de empresas que interactúan con startups en tres países, Argentina, Colombia y Perú. Y si bien los resultados son una base amplia y con entrevistas en profundidad, el estudio aclara que no tiene una pretensión “estadística” por la “naturaleza cambiante” de ese mismo escenario, donde se suelen sumar nuevos actores.
“Nosotros identificamos 500 casos en la región en un principio, pero luego pudimos constatar que sólo en Brasil había otros 500 casos”, dijo a Pymes Hugo Kantis, uno de los autores del estudio (ver Entrevista). En las conclusiones, el trabajo señala, entre otros conceptos:
. Las actividades de las corporaciones con las startups, como fuente de innovación, están avanzando (..) Les atrae, principalmente, la posibilidad de innovar en productos y procesos, en el marco de la transformación digital y la revolución 4.0, dado el rol de los emprendimientos como agentes de cambio tecnológico en dicho contexto. Por lo tanto, el perfil de las startups que buscan captar obedece a ese interés.
. ¿Qué sabemos acerca de las iniciativas corporativas que buscan innovar a través de las startups? En la gran mayoría de los casos se trata de empresas muy grandes que operan, principalmente, a nivel regional. La existencia de plataformas que trasciendan las fronteras de cada país es un activo fundamental, pues permitiría a las corporaciones apalancar los procesos de escalamiento e internacionalización de las startups.
. Del otro lado, es marginal el grupo de pymes que está comenzando a experimentar el trabajo con startups. Ello deja planteado un interrogante acerca de las escalas a partir de las cuales estas iniciativas cobran sentido, tanto para las empresas como para los emprendedores.
Se trata de una cuestión relevante desde la óptica de las políticas públicas de fomento de la innovación y el emprendimiento, siendo la asociatividad empresarial un camino hacia la resolución de estas limitaciones que podría explorarse. De hecho, este estudio ha identificado las experiencias de grandes empresas que trabajan con startups en el marco de redes de colaboración horizontal; entonces, si las grandes lo hacen, ¿por qué no las de menor tamaño?
. El interrogante en torno al tamaño de las apuestas y los compromisos queda por lo tanto planteado; sobre todo, porque los recursos que invierten las corporaciones en sus iniciativas de emprendimiento son aún bajos e inestables. Incluso, su regularidad no siempre está garantizada, sino que cada año o, a veces, ante cada actividad, deben esperar su aprobación.
. Para superar estas limitaciones y potenciar las actividades, muchas veces se apela a alianzas con otras organizaciones, tanto a la hora de captar emprendimientos como de brindarles apoyo. En este marco, cabe plantear, a modo de hipótesis, que las corporaciones que cuentan con iniciativas de trabajo con startups suelen ser las que ya contaban con un grado mayor de apertura previa al ecosistema; en muchos casos, debido a la existencia de relaciones informales por parte de sus profesionales o ejecutivos interesados en la actividad emprendedora.