Cristianus.
Biblias, libros de oraciones, remeras, tazas y anotadores con mensajes religiosos, así como crucifijos, cruces y rosarios. Además, retiros espirituales, cursos y excursiones religiosas. Son más de 1.500 los productos y servicios disponibles en Cristianus, un marketplace creado por Omar Vázquez (43), un emprendedor católico practicante que se propuso agrupar a un centenar de tiendas especializadas que, a raíz de la cuaretena del año pasado tuvieron que suspender su actividades o cerrar sus locales.
“En realidad Cristianus fue un proyecto que presenté en un posgrado que hice hace unos años, pero con la pandemia decidí que era momento para llevarlo del papel a la práctica”, explica Vázquez, licenciado en Administración de Empresas. “Entendí que podíamos ayudar a muchos emprendedores de este segmento que no tenían cómo promocionarse. A la vez, la gente que sólo tenía la parroquia como referencia, tampoco tenía dónde comprar estos productos de manera online”. Con una inversión de $ 4 millones que puso de su bolsillo y con la colaboración de su esposa, Yamila Fittipaldi, lanzaron la plataforma que, al cierre de esta edición, contaba con más de 4.000 socios registrados y alrededor de 10.000 seguidores en sus redes sociales.
Católico practicante, Vázquez cuenta que llegó a Buenos Aires desde su Misiones natal hace 15 años, con su flamante título, y fue un sacerdote quien lo hospedó en la casa de huéspedes de su parroquia durante un año. A la hora de lanzar su emprendimiento, se dirgió por una razón de pertenencia al público católico. Pero también, aclara, su propuesta apunta a los practicantes evangélicos.
“El modelo de negocio incluye la venta de publicidad, la posibilidad de abonar para destacar publicidades y la comisión por venta. Pero en esta etapa, teniendo en cuenta el contexto, no estamos cobrando; preferimos hacer crecer la comunidad, que la gente nos conozca y después, cuando pase un poco la crisis, sí empezar a rentabilizarlo”, agrega Vázquez. “Eso sí, éste no es un proyecto con fines lucrativos; todo lo que en un futuro ingrese se reinvertirá para crecer en otros países. No es una ONG, pero sí tiene un espíritu social, apostamos a certificar como Empresa B”, explica.
Por ahora Cristianus funciona sólo en Argentina, pero Vázquez prevé para 2022 desembarcar en México y más adelante en Brasil.
Si bien no está sus planes incluir en la plataforma a otras religiones, dice estar está dispuesto a acompañar a otros a concretarlo.
Vázquez se autodefine como un multiemprendedor, ya que Cristianus es el más reciente de sus emprendimientos actuales.
“Es mi naturaleza. Además de Cristianus tengo un call center y una empresa de reclutamiento de personal para I&T y con otro socio tenemos Apóstol, otro emprendimiento especializado en indumentaria y regalería con diseños cristianos”.