Marbar Se integra la segunda generación
En 1993, tras el cierre de la compañía de servicios Minera del Lago, Miguel Farroni se quedó sin trabajo. Como parte de la indemnización (era personal jerárquico), Farroni recibió en compensación parte de la flota de camiones y maquinaria. Y comenzó, como empresa unipersonal, a brindar servicios en los pozos petroleros de YPF, en Comodoro Rivadavia. Ese fue el comienzo de Marbar, empresa que hoy tiene cuatro bases propias en tres provincias y emplea a 330 personas.
“Mi padre se despertaba a las cinco, cargaba el camión y salía para el pozo. Así fue como comenzó. Luego, a medida que la empresa se expandía, abrieron una segunda base con sus hermanos en Pico Truncado, donde la familia tenía un criadero de pollos y forrajería. De a poco, todo el negocio familiar fue dirigiéndose al sector energético”, contó Luciano Farroni, quien con 30 años encabeza la segunda generación de la empresa, que continúa con su padre al frente.
Marbar proporciona a las petrolerads fluidos de perforación, servicio técnico y servicios de workover (líneas de cable, tubos enrollados o desaireado). Otros servicios son transporte de productos y ensayos de laboratorio. Opera en bases y áreas operativas en cuatro provincias: Chubut, Santa Cruz, Neuquén y Mendoza. Entre sus clientes, figuran YPF, CAPSA, Tecpetrol, Total, Meda
nito y Vista.
“Tenemos recursos propios, como la logística de los materiales y el equipamiento, y también fabricamos y confeccionamos aquellos productos que se pueden realizar en el país y el resto lo traemos desde destinos muy distintos”, describió Farroni, quien durante la última década se destacó a nivel nacional como piloto profesional (fue subcampeón de TC2000 en 2015).
En 2017, Farroni tomó la decisión de abandonar el automovilismo para dedicarse a la empresa familiar: ahora tiene
“Además de la logística propia, fabricamos y confeccionamos el equipamiento que se puede hacer en el país e importamos el resto”.
a su cargo la región Oeste de Marbar.
“Competimos con grandes multinacionales que no siempre pueden ofrecer toda nuestra gama de servicios y productos”, agregó.
Los primeros meses de la pandemia representaron un golpe rotundo al negocio, con una detención total de las actividades.
“La industria petrolera tiene un formato laboral complejo y remuneraciones muy elevadas, las cuales son imposibles de solventar sin actividad”, explicó.
El reinicio de las operaciones de Tecpetrol en las áreas Fortín de Piedra, en Neuquén, y El Tordillo, en Chubut, generó un respiro.
“De a poco el volumen de trabajo fue aumentando y nos permitió ir saliendo de la situación crítica, de la cual seguimos recuperándonos: es un hecho que sin el trabajo actual con Tecpetrol no podríamos haber afrontado los cimbronazos que se nos presentaron pospandemia”, agregó el empresario.
Marbar le provee a Tecpetrol productos químicos para la preparación de los fluidos de perforación, equipamientos para el servicio de control de sólidos como decanters: consiste en una máquina que procesa el fluido que ingresa al pozo, para limpiarlo de los sólidos no deseados que se incorporan en la perforación y reinyecta el fluido recuperado al circuito de perforación.
También le suministra bombas, zarandas (shakers) y recursos humanos. En total, las prestaciones a la petrolera del Grupo Techint hoy representan el 40% de las tareas totales de la empresa.
El vínculo con la cadena de valor de Tecpetrol comenzó en 2005, pero no fue hasta 2017 que Marbar ingresó en el programa ProPymes. “La raíz fue el desarrollo de pozos no convencionales en Fortín de Piedra: un proyecto de una magnitud impresionante, que requería mejoras tecnológicas en los productos y en los equipamientos”, describió Farroni. “Actualmente el desarrollo del área sigue su curso, habiendo atravesado la etapa inicial y más importante donde se cumplieron los objetivos”.
Entre las acciones con impacto directo se cuentan capacitaciones al personal, un servicio de consultoría permanente y acceso a beneficios financieros ligados al trabajo que une a ambas empresas.
“No se trata solo de caudal de trabajo, sino también de una sinergia de valores empresariales que compartimos”, concluyó el joven empresario.