Jugos de frutas: por qué funcionan como un remedio casero
ESTAS CONSTITUYEN UNO DE LOS ALIMENTOS MAS IMPORTANTES DEL MUNDO VEGETAL
Las frutas junto con las hortalizas, proporcionan muchas vitaminas y minerales, por lo tanto son alimentos que deben estar presentes en todas las comidas. Podemos estar seguros que comiendo frutas y verduras nunca tendremos carencia de vitaminas o minerales. Las vitaminas hidrosolubles (B y C) no se almacenan en el organismo; por lo tanto, tenemos que comer alimentos que las contengan habitualmente. La vitamina C, por ejemplo, además de ser un potente antioxidante, contribuye a una buena salud de los huesos, ayuda a sanar las heridas, además de reforzar la acción de la vitamina E, otro potente antioxidante. Comer y tomar jugos de cítricos regularmente (naranjas, pomelos, limones, etc.), entre otros, es una buena manera de adquirir esta vitamina. La adquisición de minerales es imprescindible para la salud. El hierro, por ejemplo, es necesario para el desarrollo de la hemoglobina, que es la sustancia que, además de dar color a las células rojas de la sangre, está encargada de llevar oxígeno a las células. La deficiencia de hemoglobina es uno de los factores que producen una enfermedad llamada anemia. Aunque existen alimentos animales como la carne y el pescado que proporcionan hierro, también lo podemos obtener a partir de los vegetales. Las lentejas, por ejemplo, son una buena fuente de este mineral. Las frutas proporcionan fibra, aquella parte de los vegetales que nuestro aparato digestivo no puede digerir, pero que resulta tan importante para la expulsión de la materia fecal. Pero la ingestión de abundante fibra no solamente supone una manera útil de prevenir el estreñimiento. Estudios recientes han demostrado que una dieta rica en fibra reduce el colesterol, ayuda a los diabéticos a controlar el azúcar de la sangre y previene la aparición del cáncer de colon. Son frutos ricos en fibra las peras, las fresas, las manzanas, los cítricos, los arándanos, las uvas, sobre todo en forma de pasas.
Además de proporcionar vitaminas y minerales al organismo, las frutas ayudan a conseguir el equilibrio ácido-base del cuerpo, neutralizando el exceso de acidez. Por su contenido en sales de potasio y magnesio, favorecen la eliminación de líquidos y el exceso de residuos nitrogenados y cloruros, por lo que purifican el organismo. Por su contenido en agua -entre el 80 y el 90% de su peso-, constituyen una manera ideal de hidratar nuestro cuerpo al mismo tiempo que le aportan la energía suficiente en forma de hidratos de carbono simples (fructosa, sacarosa y glucosa) muy asimilable por nuestro organismo.
LOS PRINCIPALES COMPONENTES QUE CONTIENEN LOS JUGOS FRUTAS
Vitaminas: Grupo de sustancias de origen vegetal, indispensables en la alimentación.
Minerales: son tan importantes como las vitaminas para lograr el mantenimiento del cuerpo en perfecto estado de salud. Pero como el organismo no puede fabricarlos, debe utilizar las fuentes exteriores de los mismos, como son los alimentos, los suplementos nutritivos, la respiración y la absorción a través de la piel, para poder asegurar un adecuado suministro de ellos.
Flavonoides: son un ejemplo de compuestos antioxidantes naturales, que están ampliamente distribuidos en los alimentos vegetales presentes en la dieta normal humana.
Fibra: es un conjunto de sustancias presentes en alimentos vegetales, que no pueden ser digeridas por las enzimas del aparato digestivo. Sin embargo, existen algunos tipos de fibras que son atacadas por la flora microbiana intestinal y luego absorbidas.
La fibra dietética presenta demostrados efectos benéficos sobre la salud y prevención de enfermedades.
Saponinas: son glucósidos de esteroides o de triterpenoides, llamadas así por sus propiedades como las del jabón: cada molécula está constituida por un elemento soluble en lípidos (el esteroide o el triterpenoide) y un elemento soluble en agua (el azúcar), y forman una espuma cuando son agitadas en agua.
Las saponinas son tóxicas, y se cree que su toxicidad proviene de su habilidad para formar complejos con esteroles. Las saponinas podrían interferir en la asimilación de esteroles por el sistema digestivo, o romper las membranas de las células luego de ser absorbidas hacia la corriente sanguínea.
Todos estos componentes, no solamente ayudan a que el cuerpo esté nutrido, sino que previenen la aparición de muchas enfermedades, tal como se ha venido demostrando en los estudios realizados en los últimos años. Entre las principales enfermedades que una dieta rica en frutas y verduras puede prevenir podemos mencionar las siguientes:
• OBESIDAD: Las frutas, en general, poseen muy pocas calorías y mucha fibra. Esto permite que el cuerpo se sacie con más facilidad sin que tenga que ingerir otros alimentos más calóricos. La ingestión habitual de fruta es una buena manera de prevenir la obesidad.
• ESTREÑIMIENTO: La fruta, por su riqueza en fibras, facilita la expulsión de heces del intestino y previene el estreñimiento u otras enfermedades intestinales como la diverticulosis, esta última más habitual en la gente mayor.
• ATAQUES DE CORAZON: Las frutas y las verduras previenen la formación de coágulos en las arterias y fluidifican la sangre. Se ha comprobado cómo la ingestión habitual de estos alimentos reduce de 20 a 40 % las posibilidades de sufrir un problema vascular.
• HIPERTENSION: El consumo habitual de fruta y verdura, combinado con una dieta baja en grasas, disminuye la presión arterial.
• CANCER: Estudios recientes han demostrado que la fruta es rica en componentes antioxidantes capaces de eliminar los radicales libres, unas partículas que son las responsables de la aparición de muchas enfermedades degenerativas, entre las que se encuentra el cáncer. Particularmente se ha comprobado que la ingestión habitual de frutas y verduras previene la aparición de muchos cánceres de pulmón y del aparato digestivo (estómago, esófago, colon, recto o boca, principalmente)